El fin por el Principio

Capítulo 6 (parte 1)

Verdades que duelen (parte 2)

Eran las 8 de la mañana, porque lo sé, por la bendita alarma que está sonando en estos momentos, como puedo trato de alcanzar el celular de donde sale la molesta música, pero se apaga sola por lo que decido dormir un rato más y como el mundo en estos momentos está conspirado en fastidiarme vuelve a sonar, pero la música es diferente, en este caso es una llamada por lo tanto quito las sábanas que me cubren, me siento en la cama y con toda la pereza atiendo.

– Hola –

– Hola Alejandra soy la secretaria de la doctora Sánchez, sé que usted se comunicó con mi compañera para que la vea el doctor Torres, pero él la derivo con la doctora – termino de decir aquella voz que no conocía – perdona pero no sé si me dijiste tu nombre y por qué el cambio si se puede saber – respondí mientras salía de la cama para poder tomar la agenda y anotar lo que me estaba diciendo está persona – a perdón que torpe, soy Guadalupe un gusto y el cambio es porque la doctora es colega del doctor Torres, además de que por tus resultados anteriores es más conveniente que te atienda ella y no Torres, por lo que me pregunto la doctora si podrías venir hoy alrededor de las 11hs – termino por decir ­– si no veo el inconveniente, es en el hospital –

– si es en el hospital, en el segundo piso – respondió con amabilidad – perfecto a esa hora estoy, un gusto Guadalupe –

– nos vemos en un rato Alejandra – luego de decir eso colgó.

Deje el celular en la mesa me estiro para sacar la fiaca que tengo en el cuerpo y me dirijo al baño para hacer mis necesidades. Fue una ducha rápida ya que antes de ir al hospital quería ver las cosas de la cafetería además de dejarle indicaciones a Ana y a los chicos, por lo tanto, me visto cómoda ya que no pienso hacer nada más. Una vez que me coloco el jogging negro con un buzo de tipo canguro rosa viejo y las zapatillas me dirijo a buscar mi mochila, veo el sobre que anoche me dio mi hermana, lo tomo para meterlo dentro, además de la agenda, el cuaderno de recetas nuevas que ando escribiendo y el rojo que es en donde están todas las cosas de la librería como los pedidos de libros, libros que están a la venta, etc y las cosas de la cafetería.

Una vez ya todo listo, salgo de mi pieza y me dirijo a la cocina para desayunar y dejarle hecho el desayuno a mi hermana ya que hoy ella va más tarde a la librería. Mientras pongo la pava para hacerme los mates, pongo en el horno eléctrico los cups cake que ayer hice para que se calienten ya que estaban en la heladera, una vez suena la alarma los saco y me dirijo a la mesada en donde desayunaba con mamá, lo que me trae recuerdo, una lagrima me traiciona saliéndose sin mi permiso y es en ese momento que mi hermana con la almohada pegada a la cabeza se hace presente. – Hola Ale – en el medio bosteza haciéndome reír – que haces tan temprano levantada si hoy no te toca abrir la librería hasta la tarde – pregunto cebando el mate y dándoselo a ella para que lo tome – tengo que ir hasta periódico a buscar unas cosas ya que hay que hacer un informe sobre algo –

– a bien yo voy a ir a la cafetería a ver algunas cosas y a dejar otras, vos vas a ir a trabajar ahí o vas a venir a casa –

– creo que voy a quedarme en la librería, ahí estoy cómoda y tengo los libros por si tenga que buscar algo –

– bueno entonces te alcanzo al periódico o te vas sola –

– no te preocupes voy sola necesito caminar un poco – respondió para luego irse a cambiar por lo que tome el termo, lo llene con el agua caliente y salí con el juego de mate, mochila rumbo a mi camioneta. No tardó mucho en llegar a la cafetería, miro la hora en el tablero y marca que son las 9 hs, por lo que Maru debe de estar por llegar así que bajo, me dirijo a la puerta de la cafetería para poder entrar y empezar a dejar las cosas en orden. Una vez que estoy dentro me dirijo a la pequeña oficina para dejar todo lo que cargo y es en ese momento que escucho