Capítulo 86

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Jessica estaba comenzando a desesperarse.

No solo su novio no la había tocado hasta ahora, incluso parecía estar algo alejado.

Am principio de la semana todo era normal, al menos dentro de lo esperado.

Salieron un par de veces y pasaron tiempo juntos...

El problema es que John no actuaba como "John".

John el hombre que no dudaba en besarla y tocarla frente a otras personas ahora incluso evitaba estar a solas.

Las sospechas sobre si él estaba viendo a otra persona apareció en su cabeza, pero la negó la instante.

John le diría la verdad por más fea que fuera...

Suspiró mientras su hermana Trish le sonreía presumida.

-¿Tan pronto y ya hay problemas en el paraíso?-La sonrisa de Trish esra más molesta de lo común por alguna razón.

-No. Además tu no estas mejor.-Jessica sonrió cuando le recordó a su hermana su situación.

No era que nadie se hubiera interesado...

Pero Trish tenía cierta manera de decir que no que evitó que alguien más trate de acercarse.

Pobre chico que recibió una patada en la entrepierna al tratar de robar un beso a Trish.

Ella chasqueó su lengua molesta, desde ese día muchos hombres trataron de evitarla y varias del colegio comenzaron a burlarse.

No era nada serio, pro Jessica se aseguraría de darles una visita después.

-Hablando del diablo...-Cuando el hombre que ocupaba su mente entró el cuerpo de Jesús se estremeció.

Su olor...

Era más intenso que antes.

Como si antes era solo una pizca de perfume, ahora era un olor intoxicante.

Respiró hondo involuntariamente y aquel aroma la excitó.

Miró a su hermana quien prácticamente babeaba al ver a su novio.

Ella le dio un golpe en la cabeza que funcionó pues ella la miró enojada.

John se acercó directamente hacia ella apenas la vio.

Jessica estaba por saludarlo pero para du sorpresa los brazos de John fueron a su cintura y sus bocas se juntaron.

Abrió los ojos por la sorpresa pero no negó el acercamiento de John...

Había pasado un tiempo desde que sentía ese calor...

Su aroma...

Su piel...

Era incluso más suave.

Sintió que alguien tiraba de su camisa y al recordar que estaban en el aula de clase Jessica se separó inmediatamente.

John le sonrió y puso su mano en su cuello.

-Te extrañe Jess.-Sonrojandose sin sentido se separó para ya no ser el centro de atención...

Lamentablemente el profesor ya los estaba mirando con mala cara apenas entró.

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Después de pasar un rato en detención junto a Jess y pasar el día con ella regresé a casa.

Apenas entré el olor de la pasta y la carne.

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