más

82 13 2
                                    

más

Deze afbeelding leeft onze inhoudsrichtlijnen niet na. Verwijder de afbeelding of upload een andere om verder te gaan met publiceren.

más.

Los ojos de Maud avistaban todo lo que ocurría en el aquelarre, y su corazón sentía todo lo que las brujas sentían. No le hacía falta acercarse a ese pequeño rinconcito detrás de un árbol para ver a su pupilo con labios eléctricos intentando entender a un corazón desbocado y a un cerebro desvalido. Lo veía y lo sentía. Así que sonrió tan solo un poquito y continuó bailando, con las manos entrelazadas con las del demonio esqueleto.

🌙

Louis sabía tantas cosas de Harry que le daba miedo que no pudiera saber tanto. Sabía que vivía en un pequeño pueblo de Manchester, en las islas donde Louis había nacido. Sabía que cuando el remolino le traía de vuelta, debía encargarse de un padre borracho y de una cola de pretendientas con las que no quería casarse.

—¿Y por qué? —preguntó Louis, jugando con un mechón de su pelo.

Harry le cogió de las manos y le miró.

—Porque no se siente correcto.

—¿Eres de los que piensa que hay que casarse por amor?

—Si no, ¿qué sentido tiene?

Y, ¿qué era esa sensación en su pecho, como un ratón corriendo hacia la nada, cada vez más rápido pero cada vez menos cansado? ¿Qué eran esos labios tan, tan cerca de Louis, cada vez más cerca, pero nunca sin llegar a besarse?

—No sé si un novicio puede dar el primer paso.

Y Louis pensó: «tú puedes hacer lo que quieras». Pero no lo dijo y decidió besarle. Manos en sus glúteos, queriendo atraerle más hacia él y dioses, Madre Naturaleza, por el aquelarre y los sabbath, nunca antes la saliva del otro había sabido tan dulce, como miel; nunca antes había parecido una poción de amor, embriagadora. Y, mientras se besaban, la luz se hizo en el cielo, más y más nítida, pero Louis no sintió que se quedaba sin aliento, Louis sintió más y más más.

sabbath ; lsWaar verhalen tot leven komen. Ontdek het nu