2.- Dos Oruguitas.

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A las pocas horas de llegar a la secta Yunmeng Jiang, Jiang Cheng solo hasta entonces dejó ir libre la mano de Wei Wuxian, cuando su instancia de apretarla entre la suya, durante todo este tiempo, aumentó al sentir como Wei Wuxian pretendía aceptar sus avances

- Espérame en el pabellón principal. -

Wei Wuxian extrañamente inquieto inmediatamente lo devolvió a sus cinco sentidos al indicarle apresuradamente

Causando que Jiang Cheng confundido arqueara una ceja

- ¿Por qué? ¿Ya tan rápido deseas irte? -

Wei Wuxian carraspeó fuertemente y se encogió de hombros

-  ¡Ejem! ¡No me iré! ¡Solo estoy yendo a comprar algo de vino para los dos! ¡Confíe en mí! ¡Con un poco de alcohol en nuestro sistema, ambos entraremos en calor y cuando menos se lo espere ya me estará llamando Xian Xian! -

Jiang Cheng frunció el ceño

- ¿Entrar en calor? ¿Eso que significa? ¿De qué estás...? Olvídalo. Es preferible solo sentarnos a platicar en mi ala privada y beber té para aclarar cuál será tu trabajo en la secta. No es necesario que tengas que ir a buscar vino, hay demasiados en la secta Yunmeng Jiang. Ven conmigo. -

- Uhm... Esa no es una mala idea. Pero la cuestión es... que también tengo algunos asuntos pendientes sin resolver cerca de aquí... no tardaré. Lo prometo. -

- ... -

No hubo una respuesta después de eso, y Jiang Cheng esperó hasta que Wei Wuxian continuara

- Aiya... Líder de la secta Jiang, de verdad su fiel trabajador solo arreglará sus asuntos y luego comprará algo de vino en el mercado de Yunmeng. ¿No dije anteriormente que le agradecería? Iré y volveré tan rápido como pueda, espere por mí. -

Jang Cheng todavía inquieto no tuvo más elección que bajar la mirada hacia el pasto al pensar que Wei Wuxian lo encontraría pegajoso si seguía insistiendo en que no se fuera, lo que no sabía, era que en realidad Wei Wuxian estaba esforzándose en ocultar la divina fascinación que sintió de verlo actuar como un recién casado anhelando tener cada minuto del día de su esposo

- Está bien Wei Ying. Estaré esperando por ti en el pabellón principal. -

Wei Wuxian finalmente pudo reunir la suficiente fuerza de voluntad para guardarse las inmensas ganas que tuvo de besar a Jiang Cheng en este momento y le asintió entre sonrisas cuando se dio la vuelta y caminó en dirección hacia el muelle de lotos.




***



Estando en la soledad que lo rodeaba dentro del pabellón principal, Jiang Cheng no pudo evitar pensar que seguramente Wei Wuxian había oído hablar sobre él por ser un hombre adulto en el pleno esplendor de su vida que aún no conseguía una esposa.

No podía culparlo si habría escuchado algunos cuantos chismes y hubiera pensando en si existía alguna razón en particular para no hacerlo aun.

Sin embargo, también extrañamente presentía que Wei Wuxian no lo juzgaría por rechazar tales demandas impuestas por la sociedad que no encajaban con su carácter, el cual a su entendimiento era un poco... solo un poco....

Manías. [XianCheng] + One-Shots [ChengXian]Where stories live. Discover now