Especial Eon Ji

7.8K 1.2K 2.2K
                                    

(100k votos)
¡Gracias!

—Enserio Thi Leen, gracias por salvarme de ese aterrador batido y dejarme desayunar contigo.

—No te preocupes Eon Ji, mis papás me dijeron que tú eres bienvenida aquí —habló sonriente— aunque... aviso que hoy mi papá preparó el desayuno así que puede que lo que estés comiendo tenga algún pelo o siga crudo.

—Sigue siendo mejor que el batido TaeTae —respondí llevando un poco de comida a la boca— esa cosa puede intoxicar a cualquiera. 

—Qué sucia Eon Ji, come con la boca cerrada —renegó cerrando mi boca— cochina —dijo en voz baja.

—Cochino tú —respondí con la boca llena de comida.

—Sucia maleducada

—Mugroso —seguí de inmediato.

—Puerca

—¿¡Me llamaste cómo, Jung Thi Leen!? —cuestioné levantando la voz

—P - U - E - R - C - A —deletreó cerca de mi rostro— puerca —golpeó levemente mi frente antes de alejarse con una sonrisa.

Su acción hizo que yo achinara mis ojos.

—¡Tú eres el puerco que no se quiere lavar las manos antes de comer! —repliqué.

—¡Tú no te bañas!

—¡Mi papá Jungkook dice que es para ahorrar agua!

Thi leen rodó los ojos, hubo un silencio que duró unos segundos antes de ser interrumpido por las risas de Thi Leen que fueron seguidas por las mías.

Luego de habernos insultado hasta porque sí, nos encontramos riendo como un par de bipolares.

No por nada es mi mejor amigo.

—Pero mírate, descuidada como siempre —comentó calmando sus risas— Ay, Eon Ji qué haré contigo.

Él tomó una servilleta y la acercó a mis labios para poder empezar a limpiar. Yo no le tomé importancia, pero él lucía muy concentrado.

Al parecer demasiado porque por unos momentos se quedó inmóvil.

—¿Thi Leen? —pregunté para hacer que regrese de su viaje astral— Oye, ¿Thi Leen? ¡Thi Leen!

—Ah, sí, presente —respondió saliendo de su transe y alejándose.

—Siempre eres raro, aún así te quiero —mi puño golpeó levemente su hombro.

Él asintió varias veces y su mano empezó a despeinar mi cabello. Eso hizo que me enojara y apartara su mano de inmediato.

—¡Oye! ¿Sabes cuánto tiempo me tardé en arreglarlo? —pregunté seria— Justo hoy lo arreglé más que nunca en mi vida.

—Oh, lo arreglaste... justo hoy que estamos desayunando juntos —dijo lentamente y empezando a jugar con sus manos.

Inmediatamente noté un rojo en sus mejillas, no sabía que se maquillaba tanto. Hoy se pasó con el rubor.

—Pues claro, si hoy es el aniversario de mis papás —solté una sonrisa— imagínate, quince años de casados no es cualquier cosa.

—Definitivamente no, por suerte será una celebración privada. Siempre que los acompaño, hay cámaras por todos lados —comentó aterrado— me dejan ciego.

—Bueno —comencé a llenarme la boca de comida— ya me voy, te espero en la fiesta.

—Que no hables con la boca llena —renegó de nuevo mientras yo me dirigía a la puerta— ¡te veo en la noche! —dijo antes de que yo saliera.

Un Mayordomo para ¿Yeontan? 1 |ⱽᵏᵒᵒᵏDonde viven las historias. Descúbrelo ahora