Capítulo 4

5.7K 624 36
                                    

Yoongi:



No lo entiendo.

Estoy realmente muy confundido.

¿Qué le hice para que me ignore de esa manera? Piensa Yoongi, piensa. 

Oh no, creo que ya sé.

Me adentré a la cocina, donde mi pareja todavía se encontraba realizando su blog. Decidido a pedir perdón, tomo de los hombros a mi chico y le doy la vuelta, quedando frente a frente.

—¡Perdón, cariño! —solté, de una manera tan arrepentida. ¡De verdad lo estoy! Odio que mi novio se enoje conmigo. No soporto ver su lindo rostro con sus cejas fruncidas por el enojo que guarda.

Mi chico no me respondió nada, ¡ni siquiera me estaba mirando!

—¡Jimin, por favor! —dije aún tratando de llamar su atención— ¿Estás molesto porque no te compré las gomitas que querías?, ¡te juro que no me vuelvo a olvidar de ellas, pero no me ignores más! —un involuntario puchero de mi parte se hizo presente. 








Mientras tanto Jimin...



Señora de los cielos santos, ayúdame.

¡Cree que estoy enojado con él por unas gomitas! 

Denme una buena razón por la cuál seguir este reto, porque de verdad estoy sufriendo por el hecho de aguantarme estas terribles ganas de besar su tierno puchero. 

Aquí vamos.

—¡Holly, ven aquí! —grité, ignorándolo por completo, nuevamente. 

—¿Qué? Jimin, ¿me estás escuchando? —le oí reclamar de una forma tan infantil al momento en el que me solté de su agarre.

—Ven, pequeñito. Vamos a comer, vente —dije alejándome lo suficiente de Yoongi para dejar el pequeño platito de comida del cachorrito en el suelo— ¡Yomy!, ¿está buena la comida, bebé? —pregunté al pequeño animal, quien con un movimiento de cola me dio a entender que era un sí.

—¡Amooor! —gritó, y en ese momento me comencé a sentir mal.

¡Nuevamente!

—Quédate aquí en casita, bebé, iré a comprarme algo de tomar. —acaricié la peluda cabecita de Holly y salí corriendo a la puerta principal con la cámara, cartera y el corazón (no literalmente) en las manos. 





—Así es señora Hyojin, estoy ignorando a Yoongi por un video que tanto pedían mis suscriptores. —me quejé con la dueña de la tiendita donde compré un jugo de lata. 

¿Desde hace cuánto tiempo estoy aquí?

Prendí mi teléfono para ver la hora, pero la pantalla de aquél aparato inteligente estaba llena de notificaciones de llamadas.

¿Y de quiénes son? 

De nada más y nada menos que de Yoongi.

—Ay joven Park, pues no sé qué decirle. Suerte con su reto. —respondió la amable señora del local. 

¡Les recomiendo su tienda! Es muy linda y le gustan los chismes. 

¿Por qué creen que estoy tardando tanto aquí? Estoy ahogando mis penas con ella.

Llegar a casa y ver la triste mirada de mi novio será mi perdición. Por favor, ¡crucen los dedos para que pueda seguir con este reto!










24 HORAS IGNORANDO A YOONGI. ➸yoonminWhere stories live. Discover now