Capítulo 14

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Sandra: ¿tuviste algo con esa tal Alicia?

Culebra: No, esa chica estuvo mucho tiempo detrás de mi pero no llegamos a tener nisiquiera una cita.

Sandra: y ¿por qué? Si se puede saber.

Culebra: Porque un día antes de tener esa cita recibía una llamada de una persona un poquito torpe que me dijo que alguien a quien quiero necesitaba ayuda y ya sabes que yo lucho por los míos.

Sandra: Lo sé, me acuerdo una frase que me dijiste "en la calle si se meten con los tuyos los defiendes". (Culebra rie) Esa frase me ha acompañado desde entonces, en estos 8 años que no nos hemos visto esa frase aparecía en mi cabeza una y otra vez.

Culebra: me alegra saber eso.

Sandra: ¿el que?

Culebra: Que en estos años tu también has pensado en mi (ambos rien). Chispitas yo sé que lo nuestro nunca ha sido fácil, sé que yo la he cagado muchas veces, demasiadas

Sandra: Yo también la he cagado mucho Culebra.

Culebra: Dejemoslo en que los dos la hemos cagado. Nunca se me ha dado bien expresar mis sentimientos y menos a ti, ya lo sabes pero quiero que sepas que te quiero y que nunca vamos me voy a separar de ti ni de nuestra hija. Vais a tener que lidiar conmigo toda la vida.

Sandra: "todo una vida solo si tu quieres" ¿era así no? (Culebra se rie recordando la declaración que le hizo a Sandra hace años). Claro que quiero. Gracias.

Culebra: ¿por?

Sandra: por cumplir tu promesa.

Culebra: ¿qué promesa?

Sandra: ¿no te acuerdas? (Culebra niega) Aquella vez cuando estuve a punto de irme me abrazaste por detrás, luego quedaste frente a mi, me miraste a los ojos, cogiste un mechón de mi pelo y lo apartaste detrás de mi oreja. En ese momento te acercaste a mi oído y me dijiste "por muy lejos que te vayas, por mucho que te separes de mi, siempre volveré a por ti, te lo prometo."

(*aquí os dejo el momento de la despedida y el momento en el que Sandra recuerda la promesa de Culebra, por si os apetece recordarlo)

Culebra: ya sabes que yo siempre cumplo mi palabra.

Sandra: eres increíble.

Culebra: uy estoy teniendo un deja vu (ambos ríen).

Sandra: aquel día pensé que te perdía. Tuve mucho miedo.

Culebra: (con cierto tono de burla) ay Chispitas ¿tuviste miedo por si me pasaba algo?

Sandra: no te rías. Ese día creo que es de los días que más miedo he pasado en toda mi vida. Tenía mucho miedo de que te pasara algo o de que Ángel acabara contigo.

Culebra: ya sabes que bicho malo nunca muere Chispitas. Vas a tener que aguantarme muuuuucho tiempo.

Sandra: yo encantada.

Culebra: ¿si? Me alegra mucho esa respuesta. ¿Sabes cuando tuve miedo yo?

Sandra: ¿tu miedo? ¿Cuándo?

Culebra: cuando te fuiste. (Sandra le mira con ternura) Las dos veces (Sandra mira con confusión), primero cuando volviste a tu casa y nos despedimos después de lo del apagón. Y luego cuando te fuiste hace 8 años, en ese momento tuve mucho miedo, miedo de volver a quedarme solo y así fue, volví a estar solo.

Sandra: Culebra yo...

Culebra: Chispitas ya hemos hablado de esto mil veces, eso quedó en el pasado y lo que importa es el presente y el futuro. Ahora estamos juntos y no hay nada ni nadie que nos vaya a separar, te lo juro. Si intentas irte de nuevo iré detrás de ti, vas a tener que aguantarme para siempre Chispitas.

Sandra: bueno pues tendré hacerme cargo de las consecuencias (ambos ríen). Me da un poco de cosa que Dora no pueda ser normal.

Culebra: Ella está enfnatada con tener poderes y es muy lista, sabe perfectamente que los poderes no son un juego. Ella no quiere ser normal, yo tampoco he querido serlo nunca.

Sandra: ¿como era? Ah si, yo no quiero ser normal porque si fuéramos normales tu y yo no nos habríamos conocido. (Los dos se ríen) Ahora yo tampoco quiero ser normal.

Culebra: ¿donde está Chispitas? Tu no eres la Chispitas que conozco.

Sandra: Yo no quiero ser normal porque sino nunca te habría conocido. Doy gracias a la vida porque aquel día se me cayeran aquellos 10 euros y que un chulito con gafas los recogiera del suelo.

Culebra: (riéndose) aún me duele el golpe que me diste aquel día con el bolso.

Sandra: (riéndose) en mi defensa tengo que decir que me miraste muy raro.

Culebra: no te miré raro, simplemente me enamoré de ti.

Sandra: (sorprendida) ¿con solo mirarme?

Culebra: si. Sentí una chispa que no había sentido antes. Espera, a lo mejor era hambre, que no había cenado todavía. (se ríe)

Sandra: ja ja ja Muy gracioso. Va siendo hora de que nos vayamos a dormir que además mañana Dora y yo hemos quedado con Lucía para ir de compras.

Culebra: me alegra mucho que volváis a llevaros tan bien como siempre.

Sandra: y a mi. No se merece como la traté cuando nos volvimos a ver, me arrepiento mucho de haberla tratado así de mal. A ella y a todos.

Culebra: eso ya está más que olvidado. (le da un pequeño beso en los labios) Vámonos a dormir.

Sandra y Culebra se van a dormir.

A LA MAÑANA SIGUIENTE.
Sandra Y Culebra continúan dormidos. Como de costumbre Culebra despierta un poco antes que Sandra y se queda un buen rato observándola, aún no puede creer que después de todo este tiempo vuelvan a estar juntos. Cada día se repite lo afortunado que es por poder volver a estar junto a ella. De repente escucha un ruido proveniente de la habitación de Dora, se levanta con cuidado de no despertar a Sandra y se dirige a la habitación de Dora. Cuando llega ve a su hija haciendo un dibujo, ella no se ha dado cuenta de su presencia así que Culebra decide hacerse invisible para ver qué estaba dibujando su niña. Se coloca detrás de ella y la observa mientras dibuja. Se queda realmente sorprendido al ver el dibujo, en ese dibujo aparecían ella, Sandra y él, aparecían en su casa y había un montón de corazones alrededor de ellos. Culebra se emociona y se le escapa una lágrima. La lágrima cae sobre el hombro de Dora.

Dora: ¿papá eres tu?

Culebra se hace visible ante su hija. La niña se da cuenta de que su padre estaba llorando.

Dora: papá ¿por qué lloras?

Culebra: no estoy llorando, es que me he emocionado mucho al ver tu dibujo.

Dora: ¿te gusta?

Culebra: mucho. ¿Qué tal has dormido hoy?

Dora: mejor, hoy no he tenido pesadillas.

Culebra: me alegro.

Dora: papá ¿te puedo hacer una pregunta? (Culebra asiente) ¿por qué os separasteis mamá y tu?

Culebra:...

La Familia SuperpoderosaWhere stories live. Discover now