NO LO VI VENIR (2° Temporada)

76: AHORA LO ENTIENDO

Momentos atrás.

Raúl estaba alistando sus cosas, ya era tarde y se iría a casa, de repente su teléfono empezó a sonar, tranquilamente contestó pensando que sería un cliente pero lo primero que escuchó fue... -¡No!!- se asustó primeramente, luego pensó que  era una broma, miró el teléfono como si en él encontrara la respuesta, lo volvió a llevar a la oreja.

Raúl: ¿Bueno?

Como era de suponerse, nadie contestó correctamente, seguía escuchando murmullos y gritos que en un todo no se entendía casi nada.

Raúl: ¿Quien habla?

Como si alguien fuera a contestar... -Estoy segura de que solo eres un cobarde- Reconoció la voz, aunque se escuchaba muy lejana, supo que del otro lado estaba Jade, pero aún no sabía lo que pretendía con esa llamada, siguió quieto, en completo silencio, incluso puso el altavoz tratando de escuchar mejor lo que pasaba del otro lado.
-¿Tratas de provocarlo?- su corazón latio más rápido de lo normal, reconoció la segunda voz, era de Adriana.
No hizo falta pensar demasiado, supo que ambas estaban en un mismo lugar, y si eso era así, nada bueno podría salir de eso.

Instintivamente alzó su otro teléfono y marcó a la primera persona en la que pensó, Rise.

Ella estaba en el hotel, pensando en cómo iba a poder irse sin Diana, en cómo la había tratado en el centro comercial, ella definitivamente no se merecía eso, pero otra parte de su mente, esa en donde solo habitaban pensamientos cuerdos, nada de cuentos de hadas o esperanzas, un pequeño rincón en su mente le decía que era por el bien de Diana, su amada.
Tenía que protegerla, solo en eso pensaba, solo ella lo entendía, ni siquiera Diana, cualquiera pensaría que era una locura pero lo intentó, ambas superaron tantos obstáculos que ya estaban cansadas, su destino no era estar juntas, Rise lo entendió casi a tiempo, solo faltaba que Diana pudiera entender y que se alejen con solo los hermosos recuerdos de ambas.

Se dispuso a hacerse un café, puso la cafetera y cuando estaba a punto de servirse, su celular sonó, vió que era Raúl, no tenía ganas de contestar, pero una fuerza desconocida la obligaron a hacerlo, contestó. Del otro lado Raúl sonaba tan preocupado que transmitió eso a la morena, sus palabras fueron tan rápidas y incomprensibles que Rise misma lo calló y le pidió que hablara claramente, después de escuchar un suspiro de parte del hombre, empezó a escucharlo y entender lo que decía.

Cada palabra que salía de la bocina era un golpe, en un momento escuchó la calle en dónde creían que se encontraba, no lo dudo ni un segundo, no tomó la chaqueta, corrió afuera dejando caer en celular sin colgar, poco le importaba que haya dejado la puerta abierta, bajó lo más rápido que pudo y se subió a su coche, apretó en acelerador sin dejar de pisarlo ni por un momento, se pasaba luces rojas y amarillas, no se fijó que la calle era un solo carril, solo pidió que un policía la persiguiera así tal vez llevar unos refuerzos al lugar.

Raúl maldijo para sus adentros el llamar primeramente a Rise luego a la policía, solo fue un impulso, tal vez uno que lo haga arrepentirse horas más tarde.

................

Alejandra seguía abrazando a Jade, ella también se sentía débil, perdía sangre por la herida del disparo pero no le importaba en lo absoluto. En momentos Jade susurraba cosas incomprensibles pero Alejandra solo asentía.

Hasta que vió venir un auto a toda velocidad, tocando bocina repetidas veces.
El auto se detuvo abruptamente justo en frente de ellas y de una puerta salió Rise totalmente preocupada y al ver la escena se le cortó el aire.

Jade: Amiga... (Sonrisa débil)

Rise: J-jade.

La morena sentía culpa, por varias razones que no podía enumerar.