SOLO QUIERO AMARTE - Eternamente hasta el final (Sin Corregir)

CAPITULO 18

Pase algunos días con Ian, Will y sus amigos. Decidí ir con ellos sobre todo porque Will y Jazzy me convencían. Sí, Jazzy debía saber sobre esto, conversaba con ella más seguido y notaba que algo me pasaba así que me sacaba todo de un golpe, en realidad le hablaba más sobre Will porque de Ian no sabía casi nada así como él tampoco sabía sobre mí y no creí necesario hablarle sobre él ¿en todo caso que le diría a mi mejor amiga? Hablábamos de todo menos de nuestra vida privada o pasada era como si estuviera cerrada con candado y nadie pudiera abrirla.

—Parece que le atraes a Will.

— ¿Yo? No Jazzy, él es...solo es un buen amigo.

—Quiero una foto—mi dulce y tierna amiga ya estaba comenzando a buscarme novio.

—No la tengo y aunque la tuviera no te la mostraría, no pienso salir con nadie hasta mi muerte.

—Sorel por el amor de Dios, eso no es lo que quieres.

— ¿Cómo sabes que es lo que yo quiero? —pregunté arrebatadoramente.

—No creo que quieras guardar luto por el resto de tu vida y discúlpame que te lo diga Sorel pero debes atreverte a vivir de nuevo, sal de ese pequeño mundo en el que te encuentras, estoy segura de que muy cerca de ti hay un gran chico que te ama.

—Si te refieres a Will, te aseguro que no lo es y aunque lo fuera no pienso salir con él.

— ¿Acaso no es atractivo?

—Jazzy—me queje.

—De acuerdo, pero creo que debes tomar en cuenta mis sugerencias.

—Debo irme.

Colgué después de despedirnos y me fui a la cama, las cosas en el trabajo eran agitadas, últimamente habían muchos clientes que nos tenían de un lado a otro sin poder darnos tiempo de descansar, la pase de pie la mayoría del tiempo y por más que quería sentarme no podía.

Tal vez debía retomar mi vida, como lo dijo Jazzy.

De camino al trabajo me encontré con Will y me invitó a una feria que había en el lugar.

—Vendrás ¿cierto?

—No lo sé estoy muy cansada.

—Solo serán dos horas, lo prometo.

—De acuerdo—dije ante aquella mirada tierna.

—Le preguntaré a Ian si vendrá con nosotros.

Caminamos juntos y así Will le haría la invitación. Nos llevábamos bien los tres y al parecer ya no había diferencias entre nosotros a excepción de los grandes secretos que guardábamos.

Al llegar la noche los chicos pasaron por mí a mi lugar de trabajo para partir los tres a aquella feria. No podíamos parar de reír en todo el camino ellos eran muy graciosos y me hacían sentir bien.

Subimos a algunos juegos, había mucha gente y todos ellos parecían divertirse al igual que nosotros.

— ¿Hola? —contestó Will al escuchar sonar su movíl y se alejó un poco.

Ian y yo estábamos conversando cuando Will se acercó a nosotros y dijo que tenía que retirarse.

—Lo siento, sé que yo los invite pero surgió algo en el trabajo. Prometo compensar este día. —se despidió de nosotros y se fue dejándonos solos.

— ¿Quieres sentarte? —preguntó él.

Asentí, estaba cansada, habíamos pasado aquí poco más de dos horas.