Días Festivos | Venther

San Valentín 🚩🍄

Abrió los ojos lentamente observando con detenimiento el lugar donde se encontraba, el entorno era completamente blanco y sin ninguna decoración u otra cosa que lo ayude a distinguir en qué lugar se encontraba. 

A pesar de ser un lugar fuera de lo normal sabía bien que en realidad no era real porque ya había estado varias veces ahí, por eso, no se alarmó cuando sintió la presencia de alguien detrás suyo.

—Xiao...–la voz del desconocido que lo nombraba resonó en sus oídos llamándole la atención. Su voz era tranquila y de cierta forma le era familiar, sin embargo, había algo extraño en el tono de esta. No era como usualmente la había escuchado en algún sueño.

Se giró y simplemente confirmó sus sospechas, estaba soñando. 

No era la primera vez que soñaba momentos que había vivido con Aether –su ex novio– quien según su amiga Ganyu, no había podido superar desde la ruptura que tuvieron. Se repetía constantemente que por algo habían terminado, pero lo único que causaba era que sintiera la culpa por "no ser un buen novio", según él.

—Xiao… he tomado una decisión–dijo, el ya nombrado sentía como la opción de decir algo bajaba por su garganta atragantando todas las preguntas que tenía, volver a sentir como su corazón se rompía en mil pedazos sin siquiera poder hacer algo como para evitarlo lo estaba matando nuevamente. Y por segunda vez, sintió ese insoportable dolor en el pecho que ya había sentido mucho antes, y no quería volver a lidiar con él.

—Es tu decisión, la respetaré. Pero… al menos dime por qué–respondió automáticamente, justo como lo había hecho esa noche de invierno cuando Aether decidió cortar lazos con él, no llegó al punto de bloquear su número pero sí se mudó a otro país por lo que su madre le había informado. No lo hacía por él, lo sabía bien, y en cierta parte estaba agradecido que no sea como otras personas que bloquean a sus ex's, la mayoría tiene sus razones pero le alegraba que Aether no haya hecho lo mismo que los demás. 

El rubio lo miró una vez más, y la última en la que sus ojos se encontraron. 

—Mira… encontré a alguien nuevo que me hace feliz a su lado. No estoy diciendo que tu no lo hagas o que te esté reemplazando, de hecho, fui muy feliz contigo, pero creo que sería incómodo para los dos seguir una relación cuando el sentimiento ya dejó de ser mutuo.–no miente, ambos ya habíamos dejado de sentir lo mismo el uno por el otro, parecía un chicle sacado de las películas pero nada de lo que Aether decía era inventado por él mismo.—No quiero dejar de hablar contigo ni nada solo espero que lo entiendas, y ya me has demostrado que si. Muchas gracias por todo, espero que podamos hablar cómo amigos sin que haya ninguna incomodidad.–terminó por decir, no lo iba a obligar a amarme, pero la sonrisa tan cálida que se posó en sus labios me enamoró muchas más de lo que debería, esto no estaba nada bien, pero Aether era feliz, y eso era lo que realmente me importaba. A pesar de que sea con otra persona, o que él no sepa que yo aún lo amo.

Sus ojos se abrieron por fin librando su mente de los recuerdos que lo atormentaban todos los días, meses y años. A pesar de que aún no lograba dejar de sentir esa emoción en su corazón cuando hablaba en llamada con Aether contándole cosas que hizo hoy emocionado porque conoció un lugar nuevo, podía hablar tranquilamente con él sin ningún tipo de incomodidad, cosa que ambos agradecían internamente. 

A pesar de eso, aunque hayan pasado más de un año desde que terminaron, aún quería sentir sus labios una vez más, acariciar su cabello mientras duerme sin intentar despertarlo, o cuando Aether se quedaba despierto hasta tarde por desvelarse con una serie y él tenía que levantarse a hacerle un café en su tasa de gatito. Mentiría si diría que no extrañaba esos momentos vividos, que no sentía un vacío cada que salían de casa juntos y no podía agarrar su mano para entrelazar sus dedos así mantener sus manos calientes cuando el frío viento choqué contra sus abrigos.