Lips || Minsung

13

No sabía como rechazar a la chica, después de todo se la veía muy enamorada y a gusto con él. Se sentía culpable de no poder aceptar sus sentimientos, pero mucho más de ver a Jisung con la cabeza gacha.

Sus amigos ya no estaban con él, solo pasaban por su lado y lo fulminaban con la mirada. Han estaba todo el día pegado a Hyunjin, eso le estaba empezando a molestar.

— Oye... — Debía hacerlo, más que nada arreglar todo de una vez — Creo que deberíamos parar.

— Honnie~ ¿Por qué dices eso? — Preguntó cariñosa.

— Me siento incómodo — La muchacha lo observó con atención — No me gustas, lo siento mucho.

Solo sintió un pequeño dolor en la mejilla, ella le había pegado con fuerza. Le gritó miles de insultos, hasta llegó a escupirle pero poco le importaba. Sentía que estaba haciendo lo correcto, el primer paso para recuperar aquella amistad que colgaba de un fino hilo.

La chica se fue en llanto, obviamente se sintió mal por ello. No habían estado tanto tiempo juntos ¿Verdad? Nada se comparaba con los años de amistad con el castaño.

Justo cuando tenía pensado hablarle, el timbre sonó dando inicio a las clases. Lamentablemente Han ya no se sentaba junto a él, y le dolía.

Entró al salón con desgano, viendo al que era su mejor amigo con alguien más. Charlaban animadamente, como si se conocieran desde toda la vida.

— Alumnos— Llamó el profesor para poner algo de orden. — El día de hoy les traigo un trabajo de a dos.

Para Minho era un buen momento para retomar lo que pensaba, así que más que rápido se colocó unos asientos adelante de Jisung.

— Profesor ¿Se puede elegir al compañero? — Preguntó una muchacha peliroja.

— Yo decidiré con quien en base a su rendimiento académico— Explicó con un tono cansado.

Ok, ahora el rubio no estaba muy feliz por la decisión del maestro. No podía hacer nada al respecto, pero aún mantenía la esperanza pues sus notas habían bajado bastante a comparación del menor.

El silencio empezó cuando el señor comenzó armar los grupos, comentando el tema que debía realizar cada uno y en que fecha.

— Hwang Hyunjin y Yang Jeongin.

Han soltó una pequeña risa pues al alto le comenzaron a temblar las manos. Ya le había dicho quien le gustaba, y no se trataba nada mas ni nada menos que del chiquillo.

— Lee Minho y Han Jisung.

Ahora el que se reía por lo bajo era el de cabellos largos. Ahora si o si deberían arreglar sus problemas amorosos, no había escapatoria para ambos.

— No es gracioso— Le Susurró el pequeño con la voz temblorosa— ¿Entiendes qué tengo que soportar a la chica esa en su casa?— Definitivamente no sabía lo que había ocurrido esa mañana, tampoco se lo comentaron.

Sus amigos ya lo sabían, pero preferían que ellos dos arreglen sus diferencias sin alguien de por medio. Tenían todo calculado, dentro de poco volverían a ser como antes.

— Lee Felix y... — El viejo lo pensó por unos momentos — Bang Christopher.

El pecoso bajó la mirada, no habló con él desde lo ocurrido en el salón vacío. Se sentía muy triste por rechazarlo, pues terminó enamorándose de Chan luego de pasar tiempo solos en varias ocasiones.

— Profesor ¿Puedo cambiar de compañero? — Preguntó el australiano mayor en un tono seco.

— Lo siento Bang, tus notas no son muy buenas y necesitarías a un chico como Lee para retomar.

Ese día todos necesitaban aclarar algo con el otro, unos estaban contentos por la decisión del maestro pero otros aterrados.

Las clases dieron por finalizado ese día, y Minho no perdió la oportunidad para poder hablarle. Recorrió todos los pasillos del edificio, pero no lo encontraba por ningún lado ¡Ni siquiera con Felix o Hyunjin!

Algo andaba mal ¿Acaso se estaba escondiendo? De todas formas lo encontraría, necesitaba hablar con él urgente. No soportaba la idea de perderlo.

— ¡Jisung! — Gritó para ver si su cabellera castaña se aparecía, pero nada.

Siguió caminando por cada rincón, por aulas en desuso y en uso, recibió algunos regaños por los profesores. Nada le importaba quería verlo.

Entró a cada baño gritando su nombre, hasta que en el piso tres lo encontró. Lo vió lavando su rostro lloroso frente al espejo, su corazón dolió.

— Jisung... — Murmuró en un tono tranquilo, no quería asustarlo.

El chico no se dió la vuelta, ni siquiera le devolvió la mirada a través del espejo. Temblaba un poco, lo notaba por la manera en la que secaba sus manos con un papel.

— Jisung — Volvió a llamar, acercándose poco a poco — Creo que te debo una disculpa.

Quedó a su lado, observando como sus ojos se volvían a llenar de lágrimas una vez más.

— De verdad lo siento, no tuve que dejarte solo ese día.

— ¿Crees que es por eso? — Preguntó seco, como si estuviera enojado.

Han por fin lo miró, pero ya no tenía ese brillo que lo caracterizaba. Ojeras, sus cachetes habían desaparecido y estaba mucho más delgado de lo habitual. Mostraba dolor, tristeza y mucho rencor.

— Si ¿Por qué preguntas? — Dijo extrañado.

— ¿Por qué preguntó?... ¡¿Por qué mierda pregunto?! — Gritó furioso tomándolo de la camisa — Te fuiste con otra, Lee ¡Me dejaste tirado para irte con otra!

— ¡Dios mio, Han! Solo éramos amigos— Dijo alto, pero no midió la fuerza en la que lo empujó.

El castaño cayó al piso con fuerza, con las palabras de Lee pasando por su cabeza como un eco. Quería llorar, pues jamás fue alguien especial más allá de una amistad. Se sentía usado y débil para seguir con ello.

— Jisung, yo de verdad lo sien-

— Vete a la mierda, Lee — Le gritó en un sollozo.

Se levantó con dificultad, su espalda dolía por el impacto. Salió del baño sin mirar atrás, no lo quería volver a ver en su vida después de eso.

Por otro lado el que lloraba fuera de control era Minho. Esas palabras jamás tuvieron que salir de su boca, mucho menos en la situación en la que estaban.

De igual manera seguiría intentando, no dejaría que una amistad de años se arruine.