pregnancy diary.

Chapter two

Cuando JungWon confirma su embarazo el abrazo de HeeSeung lo deja sin aire.

Nunca pensó ver a su esposo llorando de felicidad contra su vientre, o quizás era una vista más a futuro pero le gustaba. HeeSeung era un niño de corazón y que no parara de sollozar contra su estómago le parecía adorable. Enredó sus dedos en su cabello y lo acarició hasta que pudo calmarse.

La noticia corrió bastante rápido. Sus padres y suegros lo felicitaron con mucho amor y más lágrimas, cuando le contaron a sus amigos todos se pusieron como locos y HeeSeung se llevó algunos golpes por embarazar al "bebé del grupo".

—Estoy agotado...—susurró HeeSeung acostándose en su cama matrimonial, JungWon ya estaba en su pijama que consistía en ropa interior y una remera vieja del mayor.

—Entonces ven a dormir, bebé llorón —dijo acomodándose bajo las sábanas.

HeeSeung lo siguió y abrazó con un brazo la cintura de su novio y la otra la ponía debajo de su cabeza para dormir cómodo. JungWon se acomodó en su pecho colando sus manos a la trabajada y ancha espalda del mayor a la vez que enredaban sus piernas.

Ambos se dieron un beso antes de irse a dormir.

JungWon estaba haciendo el almuerzo cuando escucha a HeeSeung entrar a la casa. Ni siquiera debe decirle donde está porque el pelinegro está abrazando su cintura dejando besos en su nuca y cuello, peor que una garrapata.

—Te traje un regalo —pronunció el mayor viendo como JungWon revolvía las verduras en la olla.

—¿En serio?

El mayor asiente y sale un segundo de la cocina, al minuto vuelve con una bolsa color roja con un pequeño moño.

JungWon limpia sus manos y ve lo que su esposo le trajo. Al abrir la bolsa se queda confundido, bastante descolocado.

—¿Un cuaderno? —pregunta sin entender si es una broma— Am, ¿Gracias cariño? —logra escuchar la suave risa de HeeSeung y levanta la vista.

—Quiero que lo uses como un diario para tu embarazo. Les comenté a algunos compañeros de trabajo sobre el embarazo y una amiga me dijo que cuando estaba embarazada compró un diario y empezó a escribir. Dice que sirve mucho —explicó HeeSeung.

Tomó la bolsa y saco una pluma de color negro, un lápiz y una pequeña cajita de marcadores, era bastante lindos y algo básico para empezar.

—¿Debo hacerlo? —pregunta JungWon bastante inseguro.

—No si no quieres, pero si necesitas anotar algo sobre el embarazo tienes el cuaderno. Es exclusivo para eso.

—¿Y qué puedo anotar?

—Citas con el médico, si necesitas vitaminas, una dieta si llegan a mandarte, los días de las ecografías, como te sientes, cosas que quieres comprar, lo que debemos llevar cuando nazca. No lo sé, hay demasiadas cosas — dijo HeeSeung apagando la hornilla—. Ahora vamos a comer.

Luego de un almuerzo bastante tranquilo por partes de ambos, su esposo decidió dormir una siesta, JungWon en cambio se sentó frente al cuaderno junto a los materiales decorativos.

—Supongo que podría hacerlo...—susurró abriendo el cuaderno y tomando el bolígrafo.