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El día de grabación finalmente llegó y nadie estaba menos ansioso que la mismísima estrella del vídeo, quien llegó puntual y responsable como siempre dispuesto a trabajar en la calidad que lo distinguía, pero manifestó en todo momento le fue posible, su desagrado total con el circo entero que el staff estaba montando.

Parecía que iba a llegar alguien de la realeza o la retirada Sasha Grey al estudio esa tarde por el modo en el que todos actuaban. Iban de un lado a otro llevando utilería y sus caras angustiadas, siguiendo órdenes de todo aquel que tuviera un auricular puesto y un montón de papeles en las manos.

Si Nunew quería algo, era irse. Porque le parecía además de una completa falta de respeto a su persona, una exageración teniendo en cuenta que ese idiota no era, ni de lejos, alguien famoso.

Se dedicó a investigarlo como era debido y quiso azotar la cabeza contra el monitor de su computadora tan pronto como vió que el debut del mentado Fight ese fue nada más y nada menos que con el cliché del chico repartidor de pizza que se folla a una cuarentona de grandes pechos. Y así se llamaba el jodido vídeo, con un demonio “Milf cuarentona y tetona se folla al repartidor de pizza” ¿¡Qué clase de debut era ese para alguien respetable y serio?! Estaba tratando con un novato que ni a amateur llegaba, por todos los cielos. El chico había incursionado como “Teen” a los veintiuno gracias a la cara de niño bien portado que tenía y poco a poco fue tratando lo que, Nunew concluyó, fueron papeles horribles que le ofrecían por ser un novato.

Pasó de trabajar con Milfs a hacer de electricista con un rubia despampanante, pero en algún punto dejo de parecer twink con las piernas y brazos delgados y el corte de cabello más patético que jamás ha visto New y sus papeles ya incluían jugador de fútbol con una porrista y el hermanastro sexy de una “colegiala”. Definitivamente los años le iban bien, pues ya mayor, Loej había incursionado en lo que su agente llamó “un experimento”.

Consistía básicamente en un trío sin trama ni argumento entre su futura co-estrella, una chica y otro chico y eso fue lo que lo llevó al mundo del porno gay, donde pelirrojo y con la nariz rota al puro estilo de un chico rudo, Fight hacia pedazos sobre el capó de un auto muy costoso a un muchachito delgado y bajo que vestía de cárdigan y camisa bien abotonada.

New no va a mentir cuando diga que abrió tanto la boca  mirando el último vídeo, de apenas un mes atrás. El chiquillo delgado y sin gracia que parecía romperse al primer sentón de alguna de esas exuberantes actrices era ahora todo un semental con el torso más marcado que jamás ha visto y los brazos aceitosos a punto de jodidamente explotar. Era glorioso, porque en algún punto del crecimiento a Fight le había engrosado la voz a la tercera potencia y ¡Que alguien lo detuviera! Porque esos gruñidos y susurros sucios, estaban haciéndole a Chawarin un daño considerable.

Se preparó mentalmente para todo, porque el chico estaba bien dotado y debía tener, aproximadamente, unos dos años más que él como mínimo. Se veía fuerte y bastante poco cuidadoso, pero New quiso creer que era parte del argumento del vídeo y que estaría todo bajo control esa tarde.

Le molesta demasiado que hagan tanto escándalo por un actor, como hay miles en la industria, sí. Porque él es la estrella y él hará reventar los malditos pago por evento tan pronto se devele el tráiler, eso le tenía que quedar claro a todo el mundo por el amor de Dios.

—¿New?— el director toca a la puerta, con los auriculares colgando del cuello y una sonrisa de hijo de puta que, si no fuese algo-así-como-su-amigo a New le molestaría bastante
—¿Por qué no te has vestido?

El chico baja lentamente su botella de agua para dejarla en la mesa de centro con toda la calma del mundo—No hay prisa.—una pierna sobre la otra—Puede esperar.

Saint suspira y cierra la puerta a su espalda, recargándose sobre esta de brazos cruzados—No hagas una escena, Chawarin. Sabes que el tiempo es dinero y todo está listo ahí afuera excepto tú vestido de estudiante  con la polla bien parada y el culo dilatado.

Nunew, sin embargo, no se inmuta ni un poquito ante la crudeza de su amigo y director de escena,porque después de todo, ese es el idioma del negocio y Saint Suppapong no se caracteriza por ser precisamente sutil en nada.

—Sabes que estoy preparado.

—Siempre ganas.—el director alza ambas manos, harto y con la voz ligeramente alzada—Vamos, ayudame un poco... Mientras más rápido salgas más rápido terminaremos con esto.

El pelirrojo suspira y con un ademán, pide al director retirarse—Dos minutos.

Saint se apresura a pasitos rápidos hasta la estrella, para besarle sonoramente la frente—Nunca cambies.

Salió en dos minutos como lo dijo, profesional y bien vestido, con las mejillas pintadas de un sutil rosa que se viera natural en cámara como de chiquillo ruborizado y el uniforme de utilería bien puesto, incluyendo la estúpida falda que tuvo que usar bajo el pantalón pero agradece enormemente se vaya a quitar rápido.

Nu entró al set con Janis detrás recordándole la primer escena del guión entre tartamudeos  y pasos rápidos en tacones tratando de alcanzarlo, mientras el joven actor repetía mentalmente la chorrada de diálogos que le tocaba escupir frente a la cámara.

—¡Chawarin, cariño!— su agente se acerca desde atrás, donde hablaba con la coestrella de esa tarde y su respectivo manager—Que bueno que llegaste ya, tienes que conocer a Fight.—la mujer llama a señas al nombrado, quien vestido de traje y corbata negra, avanza con las manos en los bolsillos de su pantalón—Aquí está. ¿No es ardiente?

Por supuesto que lo era.

—Ajá.— Nunew lo escanea de pies a cabeza, pensando que sus zapatos son demasiado grandes y él es demasiado alto y se ve demasiado bien con el cabello negro sin flequillo peinado hacia arriba—Espero que sepas lo que haces.

Coqueto, el alto pelinegro le sonríe con la lengua entre los dientes—Soy el mejor en mi trabajo.

Nunew alza la barbilla, dispuesto a pasar por su costado—No te confundas. Ese soy yo—Y le da la espalda, alejándose rumbo al centro del set.

Zee suspira, silbando sutilmente sin quitarle la vista de encima a ese pelirrojo altanero. —Waoh...

Apenas pisando el set dispuesto a suerte de salón de clases, una maquillista ya retoca el rostro de Nunew y la gente encargada de las luces sigue indicaciones minuciosas sobre guardar siempre el ángulo izquierdo de la estrella porque ese es el bueno.

—¡Muy bien, a sus lugares! —grita Saint desde su silla, con el megáfono encendido y a un volumen lo suficientemente alto para hacer doler los oídos—¡Quiero silencio total, teléfono que suene lo voy a pisar!

Zee cierra y abre los labios un par de veces para esparcir el brillo labial natural sobre ellos que los hacen ver más esponjositos de lo normal, mirando bajo sus pestañas a Nunew quien se toca sutilmente con los dedos las mejillas.

—¿Listo?

Chawarin sonríe de lado—No hagas preguntas obvias.

—Puede ser demasiado para ti, pelirrojo.—Panich se inclina lo suficientemente para llegar al oído del bajito. —Avísame si quieres que pare.

Pero Chawarin no piensa darle tregua y empujándolo por el pecho con un dedo, lo mira directamente y con los ojos fieros e inmutables—Avísame tú o te correrás muy pronto.

—¡Luces!— las lámparas blancas iluminan desde arriba, el set listo y los actores en posición. ZeePruk se sienta en su lugar tras el escritorio y coloca la mano derecha sobre su ya listo amiguito. Nunew se acomoda en su banca, con las piernas juntas—¡Cámara!— las cámaras encienden, las cuatro al mismo tiempo incluyendo la móvil que hará su magia en los close-up y las tomas en primera persona—¡Acción!

Lights, camera...¡ACTION! +18|ZeeNunew Where stories live. Discover now