Jade (Segunda Parte)

Capítulo 18

Las manos de Cowen se paseaban por mi trasero a mis espaldas mientras Dereck debajo de mi me follaba lentamente.

Mi cuerpo estaba curveado de una forma que sería dolorosa de no ser por el placer que le estaban dando a mi cuerpo.

Derek follándome y pellizcando mis pezones mientras que Derek me follaba la boca despacio.

Su miembro entraba y salía de mi boca con cuidado de no ahogarme y yo disfrutaba de su sabor y su textura mientras me preparaba mentalmente para que Cowen se adentrara en mí.

Quería esto, quería tenerlos a los tres follándome todos los agujeros de mi cuerpo, por lo que cuando presionó contra mi entrada no me tensé, me relajé y me enfoqué en el placer que me estaban dando Derek y Daven.

Cowen se adentró en mí con cuidado y un gemido se quedó atascado en mi garganta por culpa del miembro de Daven.

—Lo estoy haciendo despacio, cariño —mis uñas rasguñaron el pecho de Derek al sentir como me estiraba dolorosamente por llevarlos a ambos en mi interior.

Mis ojos se cerraron con fuerza y me enfoqué el miembro de Daven en mi boca mientras Derek se esforzaba en excitarme lo suficiente para dilatarme mejor.

Había tenido dos orgasmos ya gracias a ellos, por lo que mi interior creaba sonidos húmedos cada que Derek entraba y salía de mí y eso me estaba volviendo completamente loca.

Gemí en alto cuando sentí la pelvis de Cowen chocando contra mí y lo sentí temblar mientras sus dedos acariciaban mi espalda, él estaba poniendo todo de sí para controlarse y lo agradecí mientras me acostumbraba.

Pero mi agradecimiento no duró mucho tiempo, ya que él salió completamente de mí y se acopló a las embestidas suaves de Derek para comenzar a follarme por detrás.

Mis gemidos continuaron atascados en mi garganta y Daven sonrió mientras sostenía en un puñado mi cabello.

Y los tres comenzaron a follarme sin consideración alguna. Las lágrimas escaparon de la comisura de mis labios a causa del maldito placer y mis uñas continuaron rasguñando el pecho de Derek, las manos de Cowen en mi cintura y todo lo que encontrara para tratar de retrasar el inminente orgasmo que me destruiría en cuanto llegara.

Daven estuvo a punto de retirarse de mi boca, pero sostuve su brazos aferrado a mi cabello y le rogó con mis ojos que me lo diera, que me dejara saborear su liberación como lo había hecho con la mía la segunda vez a causa del beso morboso que Cowen compartió conmigo una vez me corrí en su boca.

Y me lo dio, se corrió en mi garganta y salió un poco para dejar que algo se asentara en mi lengua y pudiera saborearlo del todo.

Jadeé extasiada tanto por su sabor como también por la forma feroz en la que mis otros dos hombres me estaban follando.

Y así simplemente me corrí, mi cuerpo se dejó envolver por el deseo, la excitación y el placer y por la forma en la que me apreté alrededor de miembro de ambos los vi apretar los dientes luchando por no correrse, pero fue inevitable, mi interior caliente y palpitante los envolvió hasta que Derek se corrió primero y Cowen lo siguió después de un par de embestidas más.

Mi cuerpo se dejó caer sobre Derek y lo escuché jadear intentando recuperar el aliento, tal y como yo lo estaba haciendo, solo que a mitad de conseguirlo terminé cerrando mis ojos y recibiendo el mundo de la inconsciencia.