La singular melodía del amor © [✓]

Capítulo 23

—Sube. —me ordena sin mirarme.

—Dame mis cosas. —exijo sin escucharlo.

—Sube. —repite rehusando a darme mis cosas.

No entiendo como pudo saber que estaba en este parque, solo se lo dije a Kenia…

—No iré contigo.

Tensa su mandíbula.

—No lo repetiré —me advierte—. Sube.

Sé que Nick era capaz de subirme por él mismo sin dificultad alguna. Pero Kenia vendría por mí.

Enciendo mi celular y veo su mensaje.

Kenia

El auto de Luca se averió: (, le dije a Nick que fuera por ti, espero no te moleste quedarte en su casa.

                                                        11:23 pm

Me mato.

Me extiende su casco, lo tomo y me lo pongo, subo, así como ordenó.

Partimos a su departamento.

No dice nada, ni me mira. Ni siquiera para insultarme. Nada, finge que no estoy.

Dudo que mi día pueda empeorar.

Él lleva mis bolsos, los deja en el suelo, apenas estoy dentro cierra la puerta y se va a su cuarto, cerrando su puerta de un portazo.

No me quiere aquí.

Y hace unas horas me rogaba porque me quedase.

Miro el sofá, ha puesto una almohada y una manta. Por lo menos tuvo el gesto.

Sonrío.

¿Estará tan enojado conmigo?

Bufo.

Vaya día de mierda.

Llamo a Kenia.

—Te felicito. —digo sarcásticamente.

—¿Por qué?

—Por empeorar mi día.

—Otra vez: ¿Por qué?

—Nick no me quiere ni ver, y antes de que vuelvas a preguntar, paso algo entre nosotros, dije que éramos amigos y… me dejó.

—A qué te refieres con algo.

—Tuvimos sexo. —le susurro apenada.

—¡¿Qué?!

Se me cayó el teléfono del respingo que me ha dado. Me asustó.

Recojo mi celular, retomo la llamada.

—Cállate.

—Y si lo hicieron ¿Qué ocurrió? ¿No es bueno en la cama?

—No es eso —ruedo los ojos—, le dije que éramos amigos. Después de eso.

—Y cómo reaccionó.

—Me dejó.

—No te dejé. —dicen a mis espaldas.

Cierro los ojos, muriéndome internamente.

Oh, muerte, llévame contigo.

Cuelgo y me preparo para enfrentarlo, no, no puedo.

—Solo será esta noche —opté por cambiar el tema, lo encaro—, mañana buscaré en donde quedarme.

Da un paso a mí.