Capítulo 19

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ʀᴇᴄᴜᴇʀᴅᴏs

_______ Pov's.

Corrí lo más rápido que mis piernas me permitieron hacia el despacho de Ava.

No podía ser verdad lo que me habían dicho.

Abrí la puerta torpemente, casi cayéndome al suelo por frenar tan rápido. Después observé todo el despacho, viendo a Ava y a Thomas allí sentados.

Mi respiración era una mierda, me sudaban las manos, todo el cuerpo me temblaba y mi corazón iba a una velocidad que no sabía que podía ir un corazón.

—No te alteres ______, siéntate, ¿quieres? —me dijo Ava, antes de que abriera la boca para replicar.

Me senté justo al lado de Thomas, cayendo al asiento bruscamente, intentando molestarla lo más posible.

Observé como la doctora suspiraba pesadamente, antes de acomodarse en su asiento, justo delante de nosotros dos.

Thomas y yo nos miramos, sin entender lo que nos habían dicho minutos antes en la Sala, esperando que Ava nos lo aclarara.

—¿Puede empezar a hablar ya? —le preguntó Thomas, perdiendo la poca paciencia que tenía.

—Como ya les han dicho, ustedes dos son los más importantes en nuestro proyecto, los únicos que tenéis la capacidad de curar a un infectado solo con vuestra sangre —nos dijo, pero sin responder a lo que estábamos esperando.

—¿Entonces? —pregunté.

—Tenéis que uniros —respondió, haciendo que Thomas y yo la miremos confundidos.

—¿Qué quiere decir con eso? —preguntó Thomas, ahora mirándola con atención.

—Lo que habéis escuchado, necesitamos un bebé con la sangre de los dos —dijo tranquila, como si lo que acabara de soltar no fuera algo descabellado.

—¿Está diciendo que quiere que Thomas y yo tengamos un bebé?! —ella asintió— ¿Está loca o qué?!

—No podemos tener un bebé, somos muy jóvenes, demasiado jóvenes —dijo Thomas, igual de alterado que yo.

—Estáis exagerando mucho, chicos, ustedes dos se tienen mucho cariño, uniros de esta forma no será mucho peor —nos dijo.

Thomas y yo nos miramos incrédulos ante lo que había dicho. Es decir, teníamos casi trece años, ¿y quiere que tengamos un bebé?

—¿No se puede esperar un poco más? _______ podría tener complicaciones con el bebé por nuestra edad —le preguntó Thomas.

—No, el virus cada vez crece más, tenemos que ponernos en marcha rápido —le contestó.

—¿Y porque no se lo dice a Teresa? Ella tienen un año más que yo, y es inmune —le propuse, y vi como Thomas me fulminaba con la mirada por eso.

—Teresa no es igual a ustedes dos, ella es inmune, pero no tiene tu misma sangre, _______ —me dijo, y yo fruncí el ceño.

—Pero somos hermanas, deberíamos tener la misma sangre —dije, a lo que Ava suspiró.

—Si, pero tu sangre es diferente a la suya, por eso la estamos analizando aún —me respondió, quitándole importancia— respecto a uniros... estaros tranquilos, tendréis privacidad, nadie os molestara.

Rodé los ojos ante eso.

—Puedo morir por esto, mi cuerpo no se desarrolló del todo, aun no me vino la menstruación —mentí, y Thomas me miró con el ceño fruncido, ya me daba igual si estaba escuchando esto, al paso que vamos me va a ver hasta desnuda.

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