Conociendo

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El día de hoy el sol estaba en lo alto, los pajaros cantaban y dos dragones caminaban lado a lado en la cera.

Izuku: Es bonito.

Irulu: Verdad que si. Kobayashi me enseño la ciudad, te encantara como es.

Izuku: ¿Esto es una ciudad? Mi padre me comento que las ciudades eran de casas de madera y muchos puestos -dijo pateando una roca por el camino-.

Hoy, ambos dragones habían salido ha visitar la ciudad, era muy buen día para hacerlo, Irulu se lo llevo para que viera todo lo hermoso que había a los alrededores.

La primera parada fue el distrito comercial; una serie de puestos en los cuales comprar los productos del día a día.

Caminando un poco llegaron a su destino y lo primero que persivio Izuku fue algo que le daba miedo. Humanos, muchos humanos caminando por sus costados como si nada ¿Qué clase de infierno fue donde lo llevaron? El pequeño dragon se escondio detras de la volubtuosa Irulu. Esta dejo escapar unas pequeñas risitas por la acción de precención de su "superior" (en poder y una que otra cosa más).

Ella lo arrastro hasta adentro ya que no quería entrar pero tampoco quería quedarse solo. Arrastrandolo alrededor de 3 minutos llegaron a un puesto en el cual vendían una especie de postre helado con diferentes condimentos y de varios sabores y colores.

Irulu: ¡Hola! Mucho gusto, ¿cuánto costaría dos helados? Uno de menta y... ¿de qué te gustaría a ti Sub-Chan?.

《Sub-Chan es un apodo de Subnautica, el apellido de pila de Izuku.》

Izuku: ¿Yo? Este... te acercarías un poco Irulu-San.

La dragona se acerco su oido a la boca de Subnautica y esta ollo unas simples palabras "No se que es un helado"(o "nieve" si no eres de un país donde le digan helado). La dragona se palmeo la cara por no haberle explicado que eran esos postres antes, llevando una escena incomoda ya que el vendedor no entendía cual era el problema.

Vendedor: ¿Ocurre algo malo señorita?.

Irulu: No, sabe, deme uno de chocolate y el de menta porfavor.

Vendedor: Enseguida sale señorita.

El vendedor con un rapido movimiento tomo agua y agito sus manos y creo dos helados; el de menta y el de chocolate.

Su kosei consistía en el momento que tomara agua y por siguiente su cuerpo o más especifico sus manos generaban un helado.

Irulu agarro ambos helados y le dio el de chocolate a Subnautica. El agradable vendedor agradecio el dinero, y ambos chicos se apartaron del puesto, dejando que la gente que estaba esperando por su mismo helado.

Ambos chicos se fueron de alli aun revisando el distrito comercial. Mientras lo hacían, Subnautica probo por primera vez el helado, un sabor indescriptible e increible en el paladar. El sabor dulce y cremoso, helado y refrescante, y aspecto sentellante fue lo que maravillo a el dragon marino.

Caminando un poco más ambos chicos veían con tranquilidad todo. Pequeños puestos aqui y por alla, niños pequeños arrastrando a sus madres a tiendas de juguetes. Todo esto era bonito, incluso para un chico que le tenía miedo a los humanos.

El hijo de LeviatanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora