Madre - Izana Kurokawa y Lectora

26

...

Si tuviera que ponerle un título a este capítulo...

Sería... Cicatriz.

.
.
.

-"Hey" Renge dijo en una sonrisa viendo a Kakucho

Él lo quedó mirando un rato y luego le preguntó.

-"Me llevas a casa hoy?"

-"Así es, tú madre no pudo venir, porque tuvo que ir al viaje de convivencia de la escuela con Izana" rascó su nuca "Te lo mencionó, no?"

-"Si, que me quedaría este día contigo... Pero no pensé que me buscarias tú a la escuela" sonrió

-"Estás bien con esto?" le extendió la mano

-"Si!" tomó tu mano y volteó a ver a sus compañeros, que lo miraban extrañados "Él es mi papá!! Tengo uno también!!" les dijo riendo leve y luego camino junto a Renge bastante feliz

-"Vaya, si que te adaptaste muy rápido a esta situación... Hey, no te sientas obligado a llamarme así, puedes decirme como quieras" Renge le comentó subiendo al auto con él

-"Me gusta llamarte papá!" Kakucho sonrió "Puedo subirme adelante contigo?"

-"Bueno, no veo porque no" lo vio sentarse a su lado y le puso el cinturón "Ahora si"

-"Gracias pa!"

Renge sonrió levemente y comenzó con el viaje.

-"Siempre quise tener un papá" Kakucho mencionó mirando por la ventana "Mamá me dijo que el hombre que me hizo era malo... Que la golpeaba y que le hacía mucho daño... Ese tipo no es mi papá..."

-"Tranquilo, ese hombre no le va a hacer daño a nadie más" Renge murmuró

-"Y tú eres muy bueno con mamá! A veces eres firme con tus hijos! Pero eso creo que solo muestra lo mucho que te importan!" rio levemente

-"Tienes una visión muy buena de mi" rio levemente

-"Es que creo que lo eres! Y... Me gusta la idea de que seas mi papá... Y que Rindou y Ran sean mis hermanos mayores... Parecemos una gran familia feliz!" le sonrió

-"Me alegra que te sientas así! Tenía miedo de que no me quisieras o me odiaras por alguna razón" se detuvo en un semáforo en rojo

-"Nunca haría eso! Vamos a estar juntos y felices por siemp-!" 

-"CUIDADO!"

Renge enseguida se acercó a Kakucho y le protegió con sus brazos.

Todo pasó en un instante.

Un auto de atrás que iba a una gran velocidad, simplemente los chocó desde la parte de atrás.

Las personas que vieron el accidente no tardaron en llamar a una ambulacia.

La persona que conducía y los chocó murió al instante, había consumido grandes cantidades de alcohol.

Renge y Kakucho lograron estar estables cuando llegaron al hospital y los atendieron.

No tardaron en llamarte, dejaste a Izana y a los Haitani en la casa de una amiga para que los cuide mientras fuiste a ver a los dos.

Kakucho miraba con tristeza su rostro en un espejo cuando llegaste, con lágrimas en su ojo.

-"Mamá..." murmuró estirando sus brazos hacia ti

-"Oh mi pequeño..." enseguida fuiste a abrazarlo con cuidado "Me alegra tanto que estes con vida... Estaba tan preocupada... Mami ya está aquí, tranquilo..."

-"Dijeron que-" él sollozaba "Pude haber muerto si- los vidrios atravesaban mi cabeza- pero Renge- tenía todo su brazo herido con vidrio-  y había mucha sangre!"

-"Ya, ya... Tranquilo... Ya pasó..." besaste su frente

-"Me veo... Horrible..."

-"Claro que no! Yo no pienso eso... Sigues siendo mi hermoso niño..." sonreiste mimándolo

-"Y Renge??" preguntó asustado

-"Shh... Él está bien... Está- con los doctores, ellos lo van a ayudar"

Pasaron unos días antes de que pudieran regresar a casa, Izana y los hermanos los iban a visitar todos los días después de clases para animarlo.

Kakucho se sentía muy mal cuando le quitaron las vendas y puntos, viendo la cicatriz que le quedó y notó que no podía ver por su ojo herido.

Regresaron a casa y se dio cuenta de que Renge no volvió aún, se preocupó mucho.

Si él no me hubiera dejado sentarme adelante... Hubiera muerto...

Si no me hubiera protegido... Hubiera muerto...

Pero yo no puedo ayudarle en nada...

Se sentía muy mal al respecto por la situación.

Hasta unos días después cuando lo vio regresar.

Sus hijos lloraban desesperados mientras lo abrazaban, temían no volverlo a ver y perder a su único padre.

Tenía su brazo enyedaso y Kakucho no lo notó lo de su rostro hasta que Renge volteó a verlo.

-"Hey, tenemos cicatrices parecidas" te sonrió apuntando a su rostro, que tenía una enorme cicatriz cruzando su rostro

En ese instante, Kakucho sintió mucha más seguridad respecto a su aspecto.

Renge es un buen hombre, y un buen padre.