captain hwang ;💛; chanjin

eight

Un nuevo sábado en el que Hyunjin no tenía nada que hacer excepto fingir delante de sus padres que era heterosexual. Cosa que no suena difícil, pero era complicado decir que estaba buscando novia cuando le preguntaban por una cuando en realidad estaba teniendo sexo con cualquier chico que le pareciese que se merecía tocar su cuerpo.

Se levantó de su cama y fue hasta el baño para peinarse y hacerse aquella pequeña coleta. Mientras se lavaba los dientes, un mensaje llegó a su teléfono.

Channie ♡:
Oye, esa cita para conocernos era hoy, no?

Mierda, se había olvidado. Tecleó un rápido sí y un "espero verte igual de guapo que siempre" y bajó corriendo las escaleras de su casa, siendo recibido por una mirada sorprendida de sus padres. Solía quedarse hasta tarde viendo vídeos en su móvil y su madre tenía que ir a levantarlo.

- Oh, ¿al fin empiezas a ser responsable? - Dijo su padre divertido, cosa que hizo reír levemente al pelinegro.

- Quedé con un amigo. - Respondió simple, sabiendo que se estaba refiriendo a Christopher.

- ¿Con el gay? - Hyunjin se quedó callado ante la pregunta de su padre.

- ¡Cariño, tiene nombre! - Le reprochó su madre.

- ¿Qué más da? No me acuerdo de su nombre, así que le digo el gay porque es lo que es, ¿no? -

Al ver la mirada de su padre posada en él Hwang se limitó a asentir y su padre lo señaló mirando a su madre, como diciéndole que si su hijo le permitía decirlo podía decirlo.

Hyunjin sabía que sus padres no lo hacían a malas, pero le hacía sentir incómodo y le hacía preguntarse aún más el si debería realmente salir del armario con ellos o no.

Desayunó algo sencillo y rápido, se vistió con lo mejor que tenía y le escribió a Christopher que le esperaría en cierta cafetería, pero la respuesta que recibió le hizo suspirar.

Channie ♡:
No prefieres que vaya a buscarte a tu casa?

Y a Hyunjin le encantaría, pero viendo a sus padres mientras hacían sus cosas supo que eso no iba a poder ser, así que sólo tuvo que buscar la excusa perfecta.

Yo:
Demasiado romántico para mi gusto

...

Y allí estaba Christopher, sentado en una mesa de la cafetería golpeando de vez en cuando esta con sus nudillos a causa de los nervios. Realmente estaba ansioso por ver a Hyunjin aunque para él no significara nada, porque era lo cierto: Hyunjin sólo sentía atracción sexual hacia él.

Bueno, él tampoco conocía mucho al pelinegro, pero le parecía bastante admirable en aspectos académicos y deportivos, sobre todo en lo último.

Recordaba la primera vez que vio a Hwang en un partido. Un Seo Changbin que a penas conocía de hace cuatro días (pero al parecer agarraba confianza muy rápido) lo había llevado esa tarde a ver el partido porque su novio estaba con los animadores. Un pelirrojo de pecas australiano que animaba con toda la emoción del mundo. Por un momento pensó que sería el novio del capitán del equipo de fútbol porque era lo típico, pero se sorprendió al saber que no.

Changbin no paraba de observar a aquel chico mientras que Christopher estaba deseando irse a casa. Nunca le había gustado ver deportes ni practicarlos. Pero aquello cambió al ver quién llevaba la banda de capitán en el brazo: aquel hermoso chico que conoció cuando llegó al instituto, Hwang Hyunjin.