04 | Entre la vida y la muerte

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Desde que uno es niño, se le inculca el deseo de encontrar a su destinado

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Desde que uno es niño, se le inculca el deseo de encontrar a su destinado. Porque encontrarlo, sería a un resultado de felicidad y amor por el resto de sus vidas. Y muy pocas han tenido la fortuna de encontrarlo. La fortuna de decir que están felices y enamorados de su destinado; además de agradecidos con la Diosa Luna por tan hermoso regalo.

Aunque, hay una muy pequeña parte oscura de todo el tema de los destinado que casi nadie habla; las parejas rotas.

Las parejas rotas, son aquella que son destinadas, pero que al final decidieron romper esa conexión para seguir su propio camino. Y son extremadamente raras, por lo que no hay datos específicos de casos de parejas rotas ni lo que pasa después cuando se romper la conexión. Solo está el conocimiento que la separación es muy dolorosa y puede llegar a la muerte.

Y Jung Kook nunca se imaginó en toda su vida, que sería de aquel porcentaje desconocido de parejas rotas. Pero ahora se encuentra en la sala de su departamento, llorando en el suelo y tomándose de su pecho, con su lazo roto y su Omega aullando en dolor.

No quiero ser tu destinado —fueron las frías palabras que le dijo Tae Hyung, una vez llegó a su departamento para deshacer aquel lazo.

Porque, para que un lazo de alma se rompa, se necesita que ambas personas se digan de frente lo que realmente sienten. Además de que estén de acuerdo con aquel fin.

Acepto ser la persona que tú no amas y no quieres como tu pareja —fue lo que contestó Jung Kook, con la voz quebrada y lágrimas escurriendo por su hermoso rostro.

Y después de que Jung Kook terminara con aquella frase, ambos tiraron del hilo que los unía hasta que éste se partiera en dos. Terminando con lo único que los conectaba.

Se miraron una última vez antes de que Tae Hyung se marchara, dejando al Omega totalmente destrozado en el suelo.

Y llegamos de nuevo a este punto, donde Jung Kook sigue en el suelo, llorando sin consuelo y preguntándose mil veces por qué su Alfa no lo quiso. ¿Acaso no era lo suficientemente bonito? O quizá... ¿No era un buen Omega?

¿Qué fue lo que Tae Hyung no encontró en él, pero sí en Yoon Gi?

Aunque, la pregunta es muy absurda. Yoon Gi es un Alfa muy hermoso y una magnífica persona que ayuda a todos sin dudar. Y una de las razones por las que Jung Kook aceptó romper el lazo, fue porque su mejor amigo también merece ser amado, y Tae Hyung lo hará con cada fibra de su piel.

Estúpidamente, se enamoró de Tae Hyung, aún sabiendo -inconscientemente- que éste no lo aceptaba como su pareja.

Hice lo correcto. Se repite como un mantra, creyendo que con aquellas palabras vagando por su mente, quizás desaparezca un poco del dolor que siente.

De pronto, escucha la puerta de entrada ser abierta. Y por un segundo, la esperanza le crea la ilusión de que es Tae Hyung volviendo a él, arrepentido y queriendo arreglar ese error. Pero sus ojos desorientados enfocan a otra persona. Es Jake, quien deja caer su teléfono al ver al Omega tirado en el suelo, casi inconsciente.

Pareja rota | yoonkookWhere stories live. Discover now