Las locas 💯🔥🔥🔥

Felicidades

NOTA: para poder adaptar el relato de hoy, hemos cambiado en el relato anterior la hora a la que vuelven Eda y Serkan al hotel. En lugar de ser pasada la media noche, son las once de la noche del día 25 de agosto... así que Eda y Serkan llegan al hotel a las once de la noche de ese dia.

Mientras Eda y Serkan están subiendo a la habitación del hotel, ella se para de repente — ¡Serkan! ¿Has dicho que son pasadas las once?— pregunta ella separando su cuerpo de la pared donde Serkan la tenia pegada.

Serkan intenta llegar a su cuello — mnhhhhh, ¿porque?

¿Son ya las doce? — pregunta ella inquieta.

No— dice Serkan mirando el reloj. — falta un cuarto de hora.

Bien, bien, corre, llévame a casa... necesito coger una cosa del coche...— dice ella.

Serkan la mira sin moverse todavía — Eda, ¿estas bien?¿que pasa?

Serkan corre por favor....— le sonríe ella. 

Esta bien.. esta bien. Le besa en la boca y se separa de ella — pero me debes una Eda Yildiz. Y me la voy a cobrar con intereses.

Cuando llegan a la casa de Eda, el coche está aparcado fuera, ella no tiene ni que entrar a su casa porque lleva las llaves en el bolso. Eda coge una bolsa y se gira sonriente a Serkan. 

¡Sígueme.!— le dice cogiendo su mano y estirándole. 

¿A donde vamos? — le pregunta Serkan.

¿Que hora es? — pregunta Eda.

Las doce menos cinco — dice Serkan —¿porque esta obsesión por la hora de repente?— le pregunta él.

Llegan a unas escaleras — tendrá que ser aquí — dice Eda sentándose en un escalón — ¡ venga, siéntate aquí! — le dice Eda quedando a su lado sentada en el mismo escalón. Rebusca algo en la bolsa — ¿hora?

Serkan, cansado de mirar la hora, le dice impaciente — las doce y un minuto...— le dice — ¿Eda?¿me vas a contar que pasa?

Ella saca una vela y la pone en una magdalena de chocolate y le sonríe — Felicidades... quería ser la primera...

El la mira, por primera vez en su vida no está solo en su cumpleaños, y le calienta el corazón saber que a partir de ahora no volverá a estar solo porque estará con ella. 

¿Un pastelito? — pregunta curioso Serkan.

Pues si—le sonríe ella

Mnhjjjj — le contesta Serkan.

Ya se que no quieres comer dulces, pero este es mejor pastelito del mundo — sonríe ella sabiendo que no se lo va a comer.

Te creo — le dice el 

Ella enciende esa vela y le mira

¡Felicidades!¡ pide un deseo! ¡Algo que quieras mucho!¿algo que no puedas tener o algo que te preocupe y no puedas— le dice hasta que él la interrumpe.

Eda, ¡Eda!— y le pide que se calle.

Sopla la vela mirándola, ella es su deseo, su mayor deseo, tener la suerte de poder estar a su lado hasta el fin de sus dias.

Ella le da el paquete — ten.

¿Lo abro?— le dice impaciente mirando el paquete perfecto que ella ha preparado para él. Saca lo que hay en la caja cuando la oye

Estuve pensando que... ¿que le puedo comprar a alguien que lo tiene todo en el mundo?— le sonríe

Serkan saca una bola terrestre y la mira en su mano — y me has... comprado el mundo ¿verdad?— le dice él