kinnporsche : el amor de un gánster por mí (En Corrección)

CAPITULO 12: "MARAVILLA"

PORSCHE

Me di la vuelta con dificultad, sintiendo un horrible dolor decabeza, mientras lentamente abría mis ojos pesadamente.Maldición!!! ¿Cuánto bebí anoche para estar así? ¡A lamierda! ¿Por qué sigues sintiendo náuseas ahora? Misbrazos se movieron gradualmente para soportar el peso de micuerpo, que levanté ligeramente para inclinarme hacia atrás.Pero el dolor de cabeza empeoraba como si alguien mehubiera puesto una piedra en la cabeza. Luego, tiré de lamanta que cubría mi cuerpo lentamente. ¡¡Espera!! Manta..?¿Manta gruesa de hidatm? ¿Cama King? Esta habitación esmuy espaciosa, ¡pero parece familiar! ¡¡Dónde estoy???!!Miré alrededor del cuarto, con mi cabeza tratando desecuenciar las actividades de anoche; anoche fuimos a CheJade Bar, después de llegar a casa, ayudé a llevar a Kinn asu habitación, entonces no encontré a Pete y terminéteniendo que limpiar el cuerpo de Kinn yo solo. Después deeso.. . ¡No me digas que esta es la habitación de Kinn! Miréde izquierda a derecha, pero no pude encontrar a nadie enesta habitación. Solo puedo ver un marco que contiene unafoto familiar de Kinn y sus dos hermanos y Khun Korn, lo queme asegura que esta es la habitación de Kinn. Agarré micabeza y revolví mi cabello por el estrés. ¡¡No lo creo!!!!¿Cómo pude terminar vivo en la cama de Kinn?! El dolor decabeza que sentí antes, desapareció en un instante. Yfragmentos de nuevos recuerdos del evento de anochepasaron por mi cabeza. Anoche, sentí un placer del cálidoaliento que golpeó mi rostro y sus labios tan suave,sorbiéndome y acariciándome lenta y agresivamente,haciéndome tentado a corresponder a tomar un sorbo ysentirnos el uno al otro. Todavía recuerdo muy bien esesentimiento, fue muy cali.... Espera ... No ... ¡¡No digas estocomo pensaba???!!! ¡MIERDA! ¿Nos besamos? ¡¿Qué estoyhaciendo?! 

Incluso si estaba bien emborracho, lo recuerdo todo. Lapersona que me lamió, asfixio y besó anoche.. ¡fue Kinn! Pero¡Que mierda!!Estaba saliendo de la cama, pero mi nariz podía oler algo.Mire hacia el costado del suelo y levante los piesrápidamente. ¡Vomito!! Vómito.... Estaba claro que era mivómito, porque después de eso, no recordaba nada y misrecuerdos terminaban ahí.

 Ugh... básicamente, Kin y yo nos besamos, recuerdo su caracuando la vi de cerca, ¡A la mierda! Traté de recordar lo quesucedió antes y me hundí un poco por un momento. 

¿Por quéme besó? Quiero decir, soy un hombre como él. ¡¿Por quéhizo eso?!O.... ¿Lo hizo a propósito para burlarse de mí y humillarme,para provocar mi enojo habitual?Me moví al otro lado de la cama y me bajé mientras miraba elreloj, que ya marcaba las nueve en punto. 

La sensación dedeja vu fue la misma que dormir en su sofá la última vez. ¡

Síclaro! Me quedé sin fuerzas, mirando la puerta de vidrioentreabierta.Caminé y abrí la puerta que conectaba la habitación con lahabitación privada de Kinn. El sonido de la puerta rodante,llamó la atención de alguien que estaba al teléfono yacostado en el sofá envuelto en una manta, se volvió paramirarme. Su rostro estaba plano como de costumbre. Dehecho, ni siquiera escuché sus gritos para regañarmedespués de que: dormí y vomité en su habitación

."¿Por qué no me despertaste? ¿Y por qué estás durmiendoaquí?" Le dije con una voz normal, pero mi voz sonaba másbaja. 

La culpa me envuelve cuando lo veo tumbado en el sofáasí mientras yo dormía cómodamente en su habitación. Mesiento realmente mal verlo tirado en el sofá así, con la mantafrente a mí.

 "Limpia tu vómito", la palabra salió de su boca mientraspresionaba el celular sin mirarme igual

."¡Sí! ¡Debería saber por qué me dejaste en tu habitación!" 

Regresé a la habitación y limpié mi vómito de anoche con unpañuelo de papel. Me sigo sintiendo mal, más aun porque miropa no huele diferente.. pero el olor a vomito y alcoholmezclados me marea nuevamente. Afortunadamente, estavez no me quité la ropa y los pantalones como antes. De locontrario, me sentiré aún más avergonzado.Usé un paño húmedo para frotar el piso y luego saqué lassábanas para lavar. Por supuesto que no las lavare yomismo.