Extra 1: ¿Cómo jugar con Laito?

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   Se me ocurrió a las 3 de la mañana y pues tocó escribir luego de un mes de entumecer mis pocas nalgas en la escuela.
   Como son formas de "encenderlo" no tendrán escenas sexuales, pero igual tratan temas picantes y el jugueteo prevalecerá.
   Sin más que decir, disfruten.
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   1. Con dulces.

   Estábamos en una reunión con varios amigos de la uni en nuestro departamento, y la verdad estaba muuuuuuy aburrida. ¿Ya se dieron cuenta que las reuniones entre hombres son con puras cervezas frente a una PlayStation? Y mientras todos, incluido mi novio, les gritaban a una pantalla, yo me estaba fusionando con la almohada.
   No estaba en contra de que se reuniesen, al contrario. Era mejor eso que andar de fiesta y aguantar sus quejas de resaca al día siguiente, pero eso no quitaba mi aburrimiento.

   Y estaba a punto de quitármelo de encima a consta suya.

   Busqué en el refrigerador una de sus barras de KitKats y tomé cinta adhesiva, un plumón y una hoja.
   Para cuando terminé tenía un KitKat que tenía pegado por la parte de atrás: "Vamos al cuarto, Daddy." Si esto salía mal...pues tomate me iba a quedar.
   Fui corriendo a la sala, donde mi novio estaba perdiendo miserablemente, así que no me iba a sentir culpable de haberle arruinado el juego.

-Amor~.

-¡Que gana el otro, Tom! ¡Espabi-! ¿Sucede algo, querida?

-Mira.

   En cuanto sus ojos vieron el KitKat casi y se lanza a comerlo, pero yo lo lancé primero. De más está decir que sus demás amigos intentaron agarrar el chocolate, pero ni pudieron tocarlo.

   ¿Cuál fue la reacción de Laito?

   Sus ojos casi se salen cuando leyó la nota, pegando el lado del papel a su pecho.

-¿Qué pasó, Laito?

-Me tengo que retirar un momento.

-¿Es en serio? Justo y remontamos.

-¿Vas a comerte el dulcesito a tu cuarto?

-Aidan, no pierdas. Confío en tí.

   Cuando volvió sus ojos a mí, me tomó del brazo con una pícara sonrisa de las que tanto lo caracterizaba y ambos subimos escaleras arriba, cerrando la puerta con pestillo.

-¿Conque al cuarto, eh~? Chica sucia...

-Siempre puedes intentar metérsela a la consola si tanto la quie-

   Me empujó a la pared, chocando con brusquedad ambas intimidades, provocando una deliciosa fricción.

-Sabes~...de todas las formas...que me imaginé que me pedirías sexo a escondidas...nunca creí que hicieras esta. Me sorprendiste, perrita.

-¿No me merezco unos cuantos azotes por ello?

   Son decir mucho más me lanzó a la cama, y mientras me estremecía por pellizcar uno de mis pezones él me susurró casi en un gruñido:

-Espero que sepas contener gritos, porque te voy a dar muchos de esos.

   Oneѕнoтѕ Dιaвolιĸ Loverѕ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora