The Crown Prince (Yoontaegi AU)

Chapter 8

Al día siguiente, Jimin aún decidió ir en contra del deseo del príncipe heredero.

Se despertó temprano y deambuló en busca de algún chisme delicioso, pero de alguna manera sus pies lo habían llevado a las puertas de la mansión de flor de durazno.

La sonrisa traviesa en su rostro era difícil de no notar a medida que se hacía más y más grande.

El viento sopló sobre su túnica de color claro y con un abanico en la mano, entró en la mansión de una manera digna y erudita.

Este era un hábito suyo, nunca tocar puertas; un mal hábito del que no esperaba deshacerse porque si lo hacía, ¿cómo sería divertido?

Jimin se parecía mucho a Taehyung en esos asuntos, de hecho, antes de que Taehyung viniera aquí, Jimin era considerado el general más desvergonzado del país, pero incluso ahora, eso no había cambiado, al menos no hasta que los dos compitieran en desvergüenza.

Cuando entró en la mansión, los guardias originalmente querían detenerlo, pero cuando vieron su identidad, no se atrevieron.

Jimin caminó por la mansión como si fuera el dueño del lugar, la vista realmente engañaría a los ojos haciéndoles pensar que solo estaba mirando alrededor de su propio patio trasero.

Sin embargo, la sonrisa en su rostro desapareció cuando pudo ver a Jungkook sentado con el rumoreado rehén, riendo y pasando un rato agradable juntos, disfrutando del té que se servía.

Esto fue algo verdaderamente increíble; cualquiera que lo viera diría lo mismo.

Uno tenía que saber que el frío general Jeon difícilmente se reiría frente a alguien o algo a menos que fuera su mejor amigo de la infancia, Jimin. Este era un privilegio especial que solo tenía Jimin y solo él podía estar orgulloso de ello, pero ¿pensar que este nuevo hombre había logrado romper las defensas de Jungkook y hacerlo reír? ¿Qué tipo de brujería era esta? ¿Era del mismo tipo que se le había echado al príncipe heredero?

Esto era peligroso.

Jimin pisoteó el suelo a propósito, haciéndoles saber a los dos hombres que alguien se les acercaba.

Cuando Jungkook escuchó la repentina intrusión, miró con frialdad, pero cuando vio el rostro del hombre que había venido, la frialdad desapareció instantáneamente y en su lugar apareció una cálida sonrisa tan dulce e inocente; esta era la sonrisa de una persona que estaba verdaderamente desprovista del mundo y no estaba preocupada por cosas que no conocía.

Cuando Jimin vio esa sonrisa, su corazón se derritió un poco y, como por instinto, una expresión enamorada se pintó una vez más en su rostro.

Taehyung también miró al recién llegado con calma, parece que no le importaba que la mansión fuera invadida de esta manera y no se sorprendió al ver esto. No fue como si Jungkook anunciara su entrada, ¿no había irrumpido también aquí como este joven?

Taehyung sonrió cálidamente al extraño, esta sonrisa lo hacía parecer inocente y apaciguador, pero Jimin no se sintió halagado en absoluto.

Jimin dobló el abanico en su mano e hizo una reverencia para saludar al hombre, "Solo soy un general aquí para saludarte, joven príncipe. Mi nombre es Park Jimin. Encantado de conocerte".

Taehyung también le devolvió la cortesía y se puso de pie, inclinándose mientras saludaba: "Encantado de conocerlo, General Park. Solo soy un príncipe tonto aquí para pasar el tiempo".

Cuando Jungkook escuchó este incómodo saludo, se echó a reír. 

Su risa ciertamente era contagiosa y pronto Taehyung no pudo evitar reírse.