Lαzσѕ dєl Dєѕtinσ || Chat Noir/Adrien × Lectora

༻Truth༺

Este capítulo fue complicado de escribir puesto que se supone que era desde la perspectiva de Marinette y su problema amoroso con Luka.

Peeeeero, como Luka y ella no se gustan en esta historia, tuve que cambiar las cosas, ahora todo es desde el punto de vista de Adrien.

La akumatización de Luka no ha cambiado, sólo que sus razones son por no saber la identidad de su padre, ya que es importante que él sepa la verdad.

Bueno, sin más qué decir, continuemos con el capítulo <3

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Narra Adrien

Suspiré desanimado—Ay, qué día tan aburrido—murmuré dejando mi mochila sobre la cama.

Plagg abandonó mi chaqueta y voló hasta su reserva de camembert—Sin tiempo para comer, ridículo—se quejaba volviendo a su oasis de comida.

Ahora seguían mis clases de piano, peeeero también tengo patrullaje junto a mi Pececito y Ladybug, ¿Qué podría ser mejor? ¿Una aburrida práctica de piano con la misma melodía de siempre O ir a patrullar la ciudad y tener una posible batalla con algún akumatizado?

¡No hay nada que pensar aquí! ¡No haré esperar a mi chica ni a la nueva guardiana!

Tomé mi teléfono y reproduje la grabación de piano que siempre pongo cuando finjo tocar el piano durante mis prácticas, con esto Nathalie creerá que estoy ocupado y no entrará a mi habitación—¡Al fin libre!—sonreí.

¡Plagg! ¡Las Garras!

—¿Qué? Ay no—farfulló Plagg siendo succionado por mi anillo.

Salí con total libertad por la ventana de mi habitación, saltando entre los tejados ¡Adoro tener esta libertad! Sentir el viento en mi cara, la brisa sacudir mi cabello y la sensación de poder ser quien realmente soy sin tener que cumplir las expectativas de nadie.

Lo admito, el día que Hawk Moth apareció fue de los mejores de mi vida, ¡Me convertí en un super héroe! Y no lo cambiaría por nada en el mundo.

Aterricé sobre un tejado cerca del centro de la ciudad, el cual es nuestro punto de encuentro para las patrullas.

Miré a mis lados al no encontrar a mis compañeras, que extraño, Mar siempre suele ser la primera en llegar.

—Voy a llenarle el cuellooooo~ De polvos pica pica~ —coreó una voz entre susurros, de pronto, Mar aterrizó a mi lado notablemente animada y con muchas energías.

Sonreí—Mar, qué bueno que llegas-

Ella me señaló bruscamente tomándome por sorpresa—¡Sufre, mamón!—exclamó de repente, luego retrajo su brazo y posó dramáticamente—¡Devuélveme a mi chica! ¡O te retorcerás entre polvos pica pica!—parece que está cantando.

Soltó una gran carcajada al verme, supongo que mi rostro delataba lo asustado y extrañado que me dejó—Adivino, ¿Maratón de canciones latinas con tu papá?—pregunté.

—En realidad, es de una banda española—corrigió—Pero casi toda Latinoamérica se la sabe; así que, estuviste cerca—reí junto a ella.