Desamor [Tk] ✔

Capitulo 14

Dos días después Jungkook volvió a la casa. Pero se quedaría en cama haciendo reposo.

—Tengo que ir a trabajar.

—Te vas a quedar ahí —le dijo Tae—. Ya tendrás tiempo para trabajar cuando te sientas mejor.

—Estoy perfectamente.

—Que testarudo.

Jungkook puso los ojos en blanco pero luego apoyó la cabeza en la almohada.

—¿Y qué? ¿Te quedarás aquí a cuidar de mí?

—Sí. —Dijo Tae decidido—. Como antes.

Jungkook se sorprendió gratamente. Miró a Tae a los ojos, para saber si hablaba en serio.

Taehyung hablaba en serio. Estaba asustado.

La parte que amaba a Jungkook tenía miedo de que algo le pasara por su culpa.

Pero... ¿acaso había una parte de Taehyung que ya no lo amaba?

—¿Iras a buscar a los niños luego?

—Claro que iré. No los voy a dejar ahí.

—Más tarde tengo que ir a la universidad.

—No vas a ir. No estás en condiciones.

—No puedo perder una semana de clase.

—Pues te jodes, la vas a perder igual porque el medico te ordenó que descanses.

Jungkook frunció el ceño.

—Es extraño que te preocupes tanto. ¿Qué mosca te picó?

—Debo cuidarte —Le dijo pacientemente deteniéndose en la puerta. Se dirigió a la cama, donde Jungkook lo esperaba con expresión confundida.

Taehyung se agachó y le dio un beso en la frente.

. . .

Mas tarde, a eso de las 13:30 Taehyung tuvo que pasar a retirar a los niños del prescolar. Soobin estaba en su modo insoportable de siempre y YeonJun parecía relajado, tan relajado que Taehyung juró que se dormiría allí andando por la calle. 

—¿Qué sucede Junnie?

—Estoy bien sin la maestra de la tarde —contestó el pequeño, entonces Taehyung entendió que su hijo estaba relajado por la falta de estrés que esa bruja le ocasionaba. 

—¿Y tú qué tal te sientes? —le preguntó a Soobin—. Te veo un poco exaltado. 

—¿Qué significa eso?

—Emocionado —habló más simple Taehyung. 

—Ah. No sé —respondió alzándose de hombros—. Mamá dice que soy hiper... hiperivo. Hipotivo. 

—Hiperactivo —le corrigió Taehyung soltando una carcajada sin darse cuenta. Le daba risa que Soobin dijera una palabra tan mal, y para colmo le faltaban unos dientes, por lo que cada vez que hablaba escupía saliva por doquier—. Y sí, si lo eres. 

Soobin le sacó la lengua, como si el hecho de ser hiperactivo representara algo malo. 

—¿Cómo está papi? —le preguntó Jun a Tae mientras cruzaban el parque que quedaba cerca de la casa de ellos. 

—Mejor, supongo. 

—¿Y no le vas a gritar hoy? —preguntó inocentemente con aquellos ojos que transmitían toda su esperanza. 

Taehyung miró de reojo a Soobin. No le gustaba que YeonJun hablara sobre los asuntos familiares enfrente de un amigo, pero no podía hacer nada al respecto; seguramente Soobin supiera todo acerca de la vida de YeonJun, después de todo, ambos eran demasiado parlanchines.