Blind Mind (Terminada)

Capítulo 31

Diario de Marta Velasco 2

Estoy desconsolada.

Completamente destrozada.

Intenté matar a Claudia.

No puedo imaginar lo bajo que me rebajaría.

¡Estaba a punto de matar a un ser humano por celos!

¿Qué pasa si mis hijos descubren la verdad?

¡Pensarían que soy un monstruo!

Pero yo no lo soy.

Amar a tu esposo no es un crimen.

Quería vengarme de él. De repente, me convertí en esta persona malvada que haría cualquier cosa para asegurarse de que los dos no fueran felices. Quiero destruirlos.

Si no puedo tener a Ubaldo, tampoco Claudia.

Le envenené el café.

No debería haber hecho eso, pero lo hice. Y Claudia sobrevivió. No bebió el café y se lo dió a la otra criada que murió.

Saben que lo hice. Saben que traté de matarla y ella me amenazó con llamar a los medios de comunicación porque sabe que el departamento de policía barrería esto debajo de la alfombra.

Sabía que nadie en la ciudad se atrevería a tocar un Velasco.

Somos invencibles.

Tenemos un poder inmenso.

4 de octubre.

Tengo que irme. Tengo que desaparecer antes de que ella lleve la noticia a los medios y me destruya.

Papá lo entendería.

Angie y Chris sabrían la verdad. Son buenos niños y supongo que tendré que aceptar mis pérdidas.

Claudia será una buena madre para ellos. Sé que dije que era malvada, pero en realidad... creo que cuando la veo ahora y cuánto le he causado dolor, creo que soy la malvada.

Todo este tiempo mientras estaba planeando su desaparición, intentando envenenarla, ha estado tranquila y parecía herida.

Ella se disculpó conmigo y pidió misericordia. Ella dice que podríamos coexistir. Ella nunca tomaría el afecto de Ubaldo para sí misma. Ella dice que podríamos continuar con el arreglo tal como está.

Ubaldo seguiría viviendo en la mansión conmigo, Marco y Carla seguirían siendo mis hijos, pero Ubaldo también la visitaría ocasionalmente. Ella quiere compartir.

Quiere compartir al hombre que pensé que era solo mío.

Estoy más allá del dolor.

Estoy muriendo por dentro.

No puedo soportarlo más y me voy a ir.

Quiero que mis hijos sepan que los amo con todo lo que tengo.

Angie y Christopher se convertirían en adultos guapos y poderosos, estarían a la altura del nombre Velasco.

Y en cuanto a Marco y Carla, también les deseo lo mejor. Quiero que tengan éxito.

Es una pena que no esté aquí para verlo.

Esta será mi último escrito en el diario.