23. Nos vemos en el infierno

396 45 0
                                    

EPOV

Esperaba un gesto, alguna frenética negación con su cabeza ¡Mierda, simplemente esperaba que dijera algo que negara aquello!

Pero lo único que hizo fue quedarse estático frente a mi, sin despegar sus ojos de los míos.

Mi corazón dio un brinco de alegría en mi pecho.

Asi que... ¿Te gusto? — no pude contenerme y se lo pregunte, ante la atonita mirada de Dej. El rostro de Gulf no podía estar más sonrojado, comenzo a abrir su boca una y otra vez, sin soltar palabra alguna.

— ¿Qué no lo sabias? — me pregunto Dej, confundido. Negué con mi cabeza, sin borrar la estúpida sonrisa de mi rostro — Oh...—Dej se giro lentamente y le dio una mirada de disculpa a Gulf, él sólo fruncio el ceño, y se alejo dando zancadas.

— Creo... creo que sera mejor que vayas a hablar con él, Mew — Dew me dio una palmadita en el hombro y yo asentí.

Creo que ahora amo a Dej.

Simplemente lo amo por ser tan entrometido.

— ¡Ey, Gulf! — chille, mientras corría para alcanzarlo. Ahora, en momentos como este, era cuando odiaba que a mamá le gustaran los jardines extremadamente grandes, no era como si hubiera perseguido a alguien antes tampoco. Gulf apuro su marcha, así que no me quedo de otra que correr hasta llegar a su lado, cuando finalmente lo alcance, jale de su brazo y me quede ahí, tratando de recuperar el aire — Whoa, si que caminas rápido — trate de bromear, pero la situación no lo ameritaba.

— ¿Que quieres Mew? — me pregunto con cansancio. Tome aire un par de veces y fije mis ojos en los suyos.

— ¿Te gusto? — pregunte, sin poder contenerme por segunda vez y obvio, sin borrar la sonrisa de mi rostro.

— Si, eh, no... digo — Gulf meneo su cabeza de un lugar a otro y gruño algo bajo su aliento. Sonreí más abiertamente, sólo por inercia al verlo en esa faceta tan infantil suya, decir que se veía completamente adorable era quedarse corto.

— Así que... te gusto — sentencie, acrecentando la sonrisa que estaba en mi rostro, un poco más y seria una sonrisa permanente. Gulf me dedico una gélida mirada y bufo — Te-gusto — repetí, separando las palabras, me gané un golpe en el brazo por parte de Gulf, quien no podía más con el sonrojo de su rostro.

— ¡Podrías dejar de repetirlo! — me dijo en la cara, tan malditamente cerca.

— Um, vamos... si no es tan malo — sonreí de lado, acercándome un poco mas a él — Te gusto — repetí lentamente. Gulf me miraba fijamente — Anda, repítelo conmigo — murmuré, mirando fijamente sus labios.

Sus labios.

Dios, los labios de Gulf eran... especiales. Tan rosados, tan abultados, tan malditamente suaves.

No — susurró — No lo diré — suspire ¿Porque tenia que ser tan terca?

Bueno... rodé mis ojos, y me acerque más a él, haciendo que nuestras narices se rozaran — Si quieres yo lo digosusurre, sonriéndole y encogiéndome de hombros, lo había dicho una vez ¿Porque no dos veces. El rostro de Gulf subió de color mientras dejaba salir un resoplido de sus apetitosos labios.

— No, no lo hagas — dijo avergonzado — Por favor no vuelvas a hacerlo — la suplica que había en esa palabra me descolocó, funcí el ceño levemente y apoye mi frente contra la suya.

— ¿Porqué? — le pregunte, en un bajo tono de voz. Gulf sonrió tenuemente y suspiro.

— Po-porque no — contesto, volviendo a levantar su vista, y fijar sus achocolatados ojos en los míos.

Lista de imperfecciones [COMPLETA] Where stories live. Discover now