~41- lamentablemente~

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Ya había pasado más de una hora y el menor no dejaba de llorar aquella imagen de su madre muerta en sus brazos lo perseguía todo el tiempo, España lo tenía entre sus brazos para que se sintiera seguro, aun que lamentablemente no era cierto, pero si servía para que el menor se calmara, iniciando con gritos desgarradores a solo llantos, España tenía por la vida del pequeño, de su cuento de hadas, pasaría al mismo infierno, se empezaron a escuchar pasos cerca, el mayor solo le dio la espalda a la puerta y se aferro al menor haciendo que su cabeza se apoye en su pecho, eran guardias ¿¡que diablos hacían hay!?

-que paso pequeño España~ tienes miedo~- dijo unos de los soldaos con burla, los demás también rieron, España pensaba que donde mierda ellos tenían derecho a molestarlos.

-te recuerdo que soy tu próximo líder, que con un solo chasquido tu estarás muerto o tal vez peor, largarse los 4- dijo España mirándolos de reojo y forma seria, en ningún momento soltaba a tenochitlan.

-si, pero por ahora no lo eres, así que... vamos aprovechar el momento- dijo un soldado para sacar un látigo de hay y asujetarlo con ambas mano.

-vamos atrévete~- dijo una voz dentro de la oscuridad todos los escucharon pero España reconoció la voz así quien se quedó quieto, estaba tranquilo.

-¿¡quien mierda dijo eso?!- dijo otro soldado temeroso, aquella voz parecía la de un fantasma.

-tu peor pesadilla- dijo la voz pata hacerse aparecer al frente de los soldados de la nada y aquel sujeto solo mostró una sonrisa mostrando filosos dientes, para que todos salieran corriendo como gallinas, tal vez no pisen ese lugar jamás, aquel sujeto se agacho a la altura de España y le dio un cálido abrazo -tu puedes quitarlo, el esta seguro contigo, lose- dijo la voz de forma tranquila.

-mataron a su madre... al frente de el, ¿¡como cree que estará seguro?!- dijo España para darse un poco la vuelta y mirar al señor, era el tipo encapuchado que lo ayudaba siempre.

-por ahora yo me encargaré que nadie cruce esa puerta nisiquiera imperio, pero tu puedes, eres fuerte España, el, su madre y yo, confiamos en ti, tu salvarás a todos, y todos los que te minimizan, los terminaras humillando, confía en mi- dijo en sujeto para desaparecer nuevamente, aun que a lo lejos el seguía viendo a España.

-gracia...- dijo España de forma tranquila, se acomodo mejor en el suelo para acostarse y seguir abrazando al menor, cada vez sus llantos desaparecían, hasta que llego el punto que estaba completamente dormido, al igual que España, al tener al menor entre sus brazos lo calmaba, así que no tardo en dormirse.

Así paso el dia, ambos estaban abrazados, el menor nisiquiera podía dormir, cuando cerraba sus ojos, la imagen de su madre lo seguía, España entendía eso así que en todos momento trató de calmarlo, incluso un momento cuando lograron dormir profundamente, el menor se despertó de golpe gritando desesperado, y España trataba de calmarlo.

No habían comido en todo el día, y ya empesaban a tener hambre, que más podrían hacer, solo debían esperarar, en ese instante la puerta se abrió y luego se cerró de golpe, España miro y había un plato con comida ¿quién lo dejó hay? ¿Será el señor? No le importo solo se levantó a buscarlo, y lo dejó entremedio de tenochitlan y de él.

-adelante come, yo no tengo mucha hambre, descuida- dijo España con una sonrisa, para calmar al menor.

Este ya ni sonreía, agarro el plato y empezó a comer de forma desesperada, pero si reacciono, le dejo algo de comida a España, ese sonrió levemente para comerse lo poco que quedaba.

-nose cuanto durará la pesadilla, pero si te sacaré de esta algun dia- dijo España para luego volver abrazar al menor, por un lado España también odiaba estar hay pero no podían salir.

La puerta estaba con llave, pero aún que luego pensó, sea quien sea abrio la puerta para entregarle un plato de comida, así que fue averiguar y si, estaba con llave, luego volvió al lado del menor, pero afuera escucho unos pasos, este los reconoció altiro, se paro nuevamente, para quedar al frente del menor de forma protectora, incluso escucho como la puerta trato de abrirse, pero nose podía, ante eso España se sorprendió, ¿la puerta estará atascada? Pero luego escucho un susurro, o mejor dicho un recuerdo "yo me encargaré que nadie cruce esa puerta nisiquiera imperio" supo de inmediato de que se trataba, así que solo se sentó en el suelo tranquilo y de inmediato tenochitlan lo abrazo.

-¡España! Abre la maldita puerta- dijo imperio del otro lado ya estaba golpeando la puerta pero nose abría.

-eso intento, pero creo que esta atorada- dijo España haciendo una voz desesperada, pero mentira, este solo estaba sentado teniendo abrazado a tenochitlan, nisiquiera la importaba si la puerta se abriera.

-carajo, pues lastima, jódete de ambre y sed maldito mocoso, pero cuando llegamos saldrás de este lugar, y no para bien- dijo imperio para irse.

España no respondió, siguió en su mente, pensaba si su padre tenia wste plan desde el inicio ¿sus amigos también? Osea más niños indefensos perderán sus vidas, su familia, el lugar donde nacieron, ¿¡todo!? Esa increíble, y España no podía hacer mucho, lamentablemente

N°2 La Perdición De América // countryhumans Where stories live. Discover now