Capitulo 34. La venganza se sirve en un plato frio.

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⚠️⚠️Advertencia: este capítulo tendrá escena muy fuertes, si eres muy sensible entonces sáltalo. (Lo pueden leer con la canción si desean).

Elena:

–¿Es obligatorio que estemos interceptados? –me queje con Alex–necesito privacidad.

–Es por seguridad además no entiendo que tienes que ocultar.

–Si quiero hablar con un hombre a media noche no podré contigo escuchándome.

–Sabes muy bien que Ronan lo mataría.

–Ronan no es nada mío y lo sabes muy bien, su única responsabilidad es con nuestra hija.

–Se nota que no conoces a Ronan si crees que te dejará libre–se puso un cable entre los dientes y lo jalo–no dejará que la madre de su hija esté con otro hombre y más si esa mujer eres tú.

–El me mintió por su culpa...

–El te protegió–terminó de ponerse de pies y avanzó hasta la computadora de mesa que tenía al lado–¿o no hubieses hecho tú lo mismo?–iba a responder y continuo ignorándome–tus padres no son tu responsabilidad y cuando aprendes eso serás libre en la vida. Ronan los odiaba pero aún así arriesgó su vida para traerlos contigo; Si con alguien tienes que estar enojada es con Natasha que fue la autora intelectual.

–Pero aún así la dejó libre por segunda vez...

–La primera fue suerte y la segunda coraje; ¿Crees que el quería dejarla viva nuevamente?. Fue difícil pero necesitábamos saber donde estaba nuestro enemigo más grande en este momento.

–¿Si eres tan Bueno como es que no puedes dar con ese hombre tu mismo?–lo encare.

–Podría, pero tardaría demasiado. Esta gente no son simple criminales Elena–tecleó algo y luego vi códigos repartirse por todo el monitor–Petrov creció en la Bratva, ese hombre es poderoso aunque queremos tapar el sol con un dedo.

–Aún así no puedo perdonarlo, mi padre está... esta muerto–me tape la boca con ambas manos para evitar un sollozo–no puedo...

–¿No puedes o no quieres?–termino de instalar el sistema y me miro directo a los ojos–no dejes que tu mamá te coma la cabeza, tú fuiste la reina de la mafia. Elena demuestra que estos cuatro años te volvieron más consecuente con lo que realmente quieres y no lo que otros te dicen que hagas.

–Esto me supera–reconocí–no se que hacer.

–Tomate tu tiempo y decide, pero hazlo por ti no por lo que Samantha o nadie te diga.

–Alex no me trates como una niña chiquita.

–No lo estoy haciendo, pero debes entender a la buena o a la mala.

Terminó con los códigos y se puso un dispositivo entre los oídos y me pasó otro a mi.

–Veamos si Ronan te las pega con otra mujer–hablo sin más.

–Eso no me importa...

–Shh déjame escuchar.

–No me mandes a callar –lo amenace–¿que tienen los Volkov que siempre mandan a callar? .

–Shhh.

–Alex...

–Te dije muy claro que salieras de nuestras vidas pero como no lo haces entonces aprenderás por las malas–se escuchaba la voz de Ronan hablando enojado.

La Bratva #2 libro. [+21]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora