05 | "¿Mi hija?"

14 5 3
                                    

Cuando desperté estaba amarrada a una camilla trate de usar mi brazo ya que es robótico y podría salir fácilmente pero nada mi brazo no estaba.

Solo vi mi mano sin dedos y sentí tanto asco, ni yo misma me hablaría, solo suspire y me rendí, solo soy una niña de 13 años, ¿Que esperaban?

Cuando la puerta se abrió y la enfermera entro, estaba por hablar cuando ella solo inyecta algo y este entra en mi cuerpo ardiendo como los mil demonios.

El color naranja subía por todo mi cuerpo, sentía como si el fuego me quemará, como si millones de moscas revolotearan dentro de mi piel, sentía tanto dolor que las muecas en mi rostro no se podían ocultar, mis lágrimas se deslizaban por todo mi rostro, y ardían.

Quería a mi mamá, la quería conmigo, pero no sabía dónde estaba, el dolor se intensificó más y más, hasta el punto de querer explotar, ni siquiera el cáncer me dolía así.

*

«Normal»

Maya solo suspiro y le sonrió, camino frente a él y lo vio a los ojos, en la espera de poder confesarle que tenía una hija y que debía ayudarla a encontrar lo que le faltaba a su fórmula.

«——» ¿Por qué? — pregunto y ella entre abrió sus labios confundida — ¿Por qué no volviste?

Una risa irónica salió de su garganta negó y se alejó de él.

«——» ¡Por favor Tony! Me engañaste ¿Que esperabas, que te perdonara y jugaramos a la familia feliz? — negó — jamás te perdonaría eso Stark, quizás Pepper esté contigo apesar de todo lo que hiciste frente a ella pero yo no, lo lamento pero yo jamás te perdonara que me hayas engañado y menos con Christian la periodista que mil veces juraste que nada que ver

Tony agachó su cabeza y después trato de ocultar un sollozo.

«——» Yo lo siento — suspiro — perdoname — Maya solo río sarcástica

«——» Oh sí señor, le perdonó el haberme humillado — tomo aire y lo expulso al instante — pero no estás aquí por eso, solo necesito de tu ayuda para mejorar mi proyecto y después puedes iré —

«——» Abandona esa idea Maya, eso no funcionara todos terminarán igual —

«——» No entiendes Tony, necesito que funcione — decía con suplica en sus ojos —

«——» ¿Por qué? — insistió

Maya estaba por responder pero Aldrich entro y hablo.

«——» Tony, Tony, Tony — dijo como si de una melodía se tratara —

«——» No les ayudare — sentenció

«——» Es una lástima — sonrió — aún recuerdo cuando me dejaste en el techo, los primeros 20 minutos creí que llegarías, las 3 horas después me di cuenta de que no lo harías, observe a bajo y nadie me buscaba eso me dio una idea — levantó sus manos

*Usar el anonimato Tony, tú me ayudaste y mucho — sonrió — me diste la llave para hacer lo que el logrado y me diste lo más valioso que una persona puede darle a otra — vio a Maya  — desesperación — lo vio — y hoy te regresaré el favor — lanzó tres canicas al suelo las cuales mostraron un holograma de Andy sufriendo, Maya lo vio boquiabierta y negaba — está en la fase de si aceptar o no el extremis

«——» Eres un traidor — le reprochó — dejala ir — lo amenazó — dejala ir — suplico asustada

«——» Ya no se puede y lo sabes, ella lo aceptara o terminará como nuestros sujetos de prueba — se encogió de hombros —

«——» Te odio y te mataré ahora mismo — le disparó todas las balas que tenía la pistola y Aldrich solo río — deja a mi hija — corrió a él para golpearlo pero el puño en su pecho fue su respuesta el cual la atravesó, vio a Tony y con su último suspiro dijo — Cuidala ella es tu hija —

Dicho eso falleció ante sus ojos, paso saliva y estaba digiriendo le que le dijo y en su cabeza se repetía la misma pregunta, «¿Mi hija?».

Aldrich sonrió y se guardo la pistola.

«——» La buena noticia es que se acaba de abrir un puesto importante — se encogió de hombros — nos vemos luego Tony — salio de ahí como si no acabará de asesinar a Maya

Tony seguía debatiéndose si era verdad o no y recordó cuando fue a buscar a Maya a su antigua casa y el vecino le respondió.

«——» La señorita Hallen se fue a su ciudad natal, según ella tenía que tener más tiempo ahora con la llegada de Andy.

Andy no era su nueva pareja como lo creyó hace tantos años, Andy era su hija y fue un completo imbécil con ella, paso saliva y se propuso una cosa.

Esa rubia voluptuosa tendrá lo que tanto merece unas canicas rodandole por sus piernas y una bala entre sus cejas.

Somos Un Desastre | Pietro Maximoff |Where stories live. Discover now