Capítulo 1

5.8K 93 19
                                    

Estaba segura de que ese día todo iba a cambiar, mi sueño de haría realidad.
- ¿Entonces me acompañarás? - le dije a Clara
- Esque... ...si, supongo que si
- ¡¡Ahhhh!! Te quiero te quierooo
- Lara, ¡suéltame! ¿Sabes la cantidad de chicas que habrá como para que se vaya a fijar justamente en ti?, no insinúo que si te conociera personalmente no le fueras a gustar pero ¡habrá mucha gente! Y muchas chicas que quieren lo mismo que tú.
- Si, si... lo que tú digas, pero yo no me voy de allí sin una sudadera suya.
Clara suspira con dramatismo. El plan era que iríamos a ver un partido de fútbol con la finalidad de que yo consiguiera una sudadera de Gavi. No había un plan concreto establecido, esperaba a ver qué me deparaba el futuro.

A mis 17 años, aún no he tenido ningún novio, tampoco me ha besado nadie y ha sido por voluntad propia, es decir, que se me han presentado algunas oportunidades, pero no he encontrado a nadie tan bueno, ni que me guste lo suficiente como lo hace Gavi. Y és por eso, que esta noche iré a por todas.

Llega la hora de prepararse y decido que lo más oportuno es ponerme la camiseta de la nueva temporada de Barça con unos tejanos cortos y unas converse negras.
En cuanto al pelo, decido dejar mis ondas castañas y rebeldes sueltas, y cogerme dos mechones, uno de cada lado de mi pelo, hacia atrás en un pequeño moño, de modo que el pelo no se me cae a la cara pero lo sigo llevando suelto y me cae por debajo de los hombros. Me pongo un poco de rímel encima de mis ojos color miel y un poco de pinta labios de color rojo oscuro.
Para finalizar, opto por ponerme un collar con una seta verde y unas gafas negras de SHEIN en el pelo, que son más de adorno que para el sol.

Una vez ya lista, llamo a Clara, que también está en las mismas que yo y luego aviso a un taxi para que me lleve al Camp Nou.

Ya de camino, me sudan las manos, y no voy a mentir, estoy muy nerviosa, este podía ser el momento que iba a cambiar mi vida o destrozarla en mil pedazos, pero me aterra lo que pueda suceder.

Ya llegando, veo a lo lejos a Clara que justo acaba de llegar, tiene una sonrisa en el rostro y me saluda con la mano.

Había llegado el momento, y estaba más que preparada.

A un paso de ti (Pablo Gavi) Where stories live. Discover now