Prisionero

Capítulo 7.

El día había llegado, Draco se encontraba en King's Cross, la lluvia caía con fuerza, no pudo evitar el no sonreír al recordar la fascinación de Harry por la lluvia, anhelando el día en el que pudiera sentir las gotas de agua brotar por todo su cuerpo. Podría sentirse ridículo al estar varado en medio de la gente que pasaba por doquier dándole roces en el hombro, pero él, él se hallaba perdido en sus pensamientos sonriendo de la nada, ignorando por completo las voces de sus padres.

Después de una larga despedida, se marchó dirigiéndose al tren, esperando encontrar a sus amigos en el mismo vagón que compartían juntos.

A paso largo, sin voltear a ver a los demás alumnos de cada casa que se encontraban ya sentados en cada vagón, escucho una voz por detrás que cada vez se hacía más elevada. Al intentar voltear, sintió dos brazos en su cintura, rodeándolo por completo, giró su cabeza por sus hombros y unos labios tocaron su mejilla derecha.

...

-Ven Blaise, justo Theo y yo estábamos hablando de ti –dijo Pansy entusiasmada al ver a su amigo abrir la puerta del vagón, radiando alegría por todo su cuerpo.

- ¿Ah sí? Tanto me extrañabas –le dio una mirada burlona.

-A todos, no te creas tan especial, pero como sea, les tengo una noticia –comenzó a dar un tono de suspenso en su voz.

- ¿De qué hablas? –preguntó interesado.

-Se trata de nuestro querido Draco.

- ¿Ahora qué hizo? –hablo Theo después de retomar su postura al estar distraído admirando el oscuro cielo.

-Es algo bueno, supongo y al fin se le va cumplir.

- ¡Ya dinos, Pansy! –quiso saber Blaise, intrigado.

-Pues resulta qu...-paro en seco al ver llegar a Draco que estaba detrás del vidrio de las ventanas de la puerta.

-Llego tarde, discúlpenme –dijo Draco abriendo la puerta.

Al verlo entrar notaron que Draco no se encontraba solo, su mano estaba entrelazada en la de alguien más, la fina y pálida mano era de su novia Astoria Greengrass que, como todos Hogwarts sabían, eran la pareja más estable y amorosa de todo el colegio, nunca se les veía pelear, decían que ambos estaban tan enamorados del uno al otro. Nunca llegarían a pensar que estos algún día terminarían la relación, los veían casados.

- Hoy Astoria se sentará con nosotros, denle espacio –ordenó.

- ¿Cómo estás? –pregunto Pansy cortésmente hacia Astoria.

- Excelente, muchas gracias, tengo buenas noticias, para mi novio –volteó a ver a Draco con una sonrisa.

- Vaya...nos tienes intrigados, Tori, ¿lo sabremos pronto? –dijo dándoles una mirada a sus dos amigos que se encontraban a sus lados.

- Por supuesto que sí, mi Draco les contará –apretó cariñosamente la mano del contrario, levantándola y así soltar un corto beso en ella.

Todo el viaje fue para contar lo que habían hecho en todas las vacaciones, usualmente se juntaban todo el verano, sin embargo, la desaparición de Draco, hizo que sus padres se alarmaran y no saliera de la Mansión si no era por emergencias. Sus amigos y su novia se habían enterado de lo sucedido por sus familias y dudosamente les creyeron.

- Debió ser muy horrible lo que viviste, yo no podría vivir durante tres semanas solo y con tanto muggle, ni loco me mezclaría con ellos –opinó Blaise.

- Si...fue bastante difícil –dijo Draco cortantemente.

- Pero aun no entiendo ¿Cómo no pudiste irte desde ese día? –preguntó Astoria, con intriga.