ASÍ SOY YO (Original)

*11*

-Buenos días- saludó Richard entrando a la cocina.

Su esposa e hija casi se atragantan con el café.

Entre ellas se miraron con complicidad.

En cuanto viera que Jackson no había bajado preguntaría por él y si no sabían cómo hacerle creer que estaba bien subiría y vería con sus propios ojos lo que le pasaba.

No contaban con Aaron quien sin saber que el padre de Jackson seguía en casa bajó las escaleras y entró en la cocina.

-Shelly, ¿Puedo llevarle algo para desayunar a Jack...-

Se quedó con la palabra en los labios al toparse al padre de Jackson

-¿Aaron?- se extrañó Richard -¿Qué haces tú aquí?-

-Yo...es-es que...a-anoche...pues...be-bebí más de la cuenta y...-

Richard se volvió a su mujer e hija.

-¿Por qué está aquí?-

-Ya le has oído, bebió de más y le daba miedo volver a casa- repitió Shelly denotando nervios.

-Ya sabes cómo es Jerry- añadió Susan.

Alzando la mirada, el hombre escupió:

-Sé como es y cómo suba y...vea algo que no me gusta...-

Como un vendaval, Richard subió las escaleras de dos en dos, seguido por ambas mujeres y Aaron.

Enérgicamente empujó la puerta del dormitorio de su hijo...

Y lo vio.

Su rostro estaba mejor que anoche pero aún tenía los ojos morados, los labios hinchados y heridas por las mejillas.

-¿Quién ha sido?- preguntó su padre.

-Pa-papá no, olvidalo, estoy bien- intentó detener lo que sabía que su padre era capaz de hacer.

-¿Quién-ha-sido?- inquirió el hombre.

-Richard cálmate- pidió su esposa llegando a su lado junto con su hija y Aaron.

Dándose la vuelta, Richard miró al rubio de rizos.

Nada más hacerlo, Aaron bajó la mirada.

-Lo voy a matar- masculló Richard, furioso.

Y se precipitó escaleras abajo.

-Dios mío, va a matarlo-

Susan corrió tras él.

Bien sabía a por lo que iba.

Llegando abajo oyó el sonido de algo cargándose...

Y su esposo apareció con la escopeta en alto.

-Richard, no hagas una locura- detuvo ella.

-Me tiene hasta los cojones, hasta los mismos cojones- ladró él.

Shelly y Aaron también bajaron asustándose al ver al mayor con una escopeta en la mano.

-¡Papá no hagas una tontería!- pidió la chica.

Sin hacerles caso, Richard salió de casa justo en el preciso instante en que vio llegar una Nissan Navara negra.

Arrugando el ceño vio cómo se detenía y de ella salía su sobrino y...

Keith.

-Pufff, ¿También tengo que matarte a ti?- se lamentó.

-¿Tío Rick dónde vas con esa esco...-

Cameron no terminó la pregunta pues un disparo casi hiere a Keith, quien ágilmente lo pudo esquivar, yendo a dar en una llanta.

Observando cómo se desinflaba, Keith regresó la vista al otro.

-¿¿Te has vuelto loco Richard??- increpó -¡¡Casi me das y has pinchado la rueda de mi coche!!-

-¿¿Tú qué eh?? No sales del armario pero te cepillas a todos los que puedes...- espetó Richard colérico.

Cameron miró a su tío y al pelinegro.

-Mi...mi tío lo...¿Lo sabe?- se sorprendió.

-¡Pues claro que lo sé Cameron!- exclamó su tío que colocándose otra vez el arma en el hombro apuntó al otro -¿Cómo te atreves a... SEDUCIR A MI SOBRINO MALDITO HIJO DE PERRA?-

Y otra vez disparó.

Por suerte erró el tiró pues Keith volvió a esquivarlo.

-¡¡Rick, no es así!!- se defendió.

-¡¡Anda que no!!- bramó Richard.

Y volvió a disparar...

Yendo a dar aunque rozándole en una pierna del hombre.

Éste cayó al suelo con un grito de dolor, cosa que hizo a Cameron ir en su ayuda.

-Apártate Cameron que lo voy a rematar- mandó su tío.

El joven girándose a él exclamó:

-¡No!-

-¿No?-

Ayudando a ponerse en pie a Keith, encaró a su tío para decirle:

-¡Él no me ha seducido, yo quise!-

-¿Que tú qué?-

Richard puso cara de no comprender nada.

-Bueno, sí que es verdad que él empezó, anoche en la fiesta- comenzó a explicar ganándose una mirada de terror por parte de Keith.

-¡Pero no le digas eso o me volverá a disparar!- murmuró por lo bajo Keith y temiendo por su vida.

-Cállate o no me la metes más- amenazó Cameron con el mismo tono de voz.

-¿Me estás diciendo que fue... voluntario por tu parte?- preguntó Richard rascándose el mentón con el cañón de la escopeta.

Cameron rodó los ojos afirmando:

-Siiii-

-Ooomm, vale- quedó conforme Richard -Lo siento mucho Keith pero... conociéndote...¿Te duele mucho?-

Keith sonrió cínicamente.

-Jeje, no, que va, ¡Me acabas de pegar un tiro en la puta pierna! ¿¿Tú qué crees eh??-

-No seas un cobarde y sal del armario de una jodida vez y no irán pegándote tiros-

-¿Y tú a dónde vas con la escopeta?- indagó Cameron.

-A matar al cabrón que ha golpeado a tu primo-

Sin mediar ni media palabra más trotó hacia su ranchera, lanzó el arma en el asiento del copiloto, subió y haciendo ruedas se fue en busca del padre de Aaron dejando a su sobrino y a Keith a cuadros y a su mujer, hija y al que era más que su posible yerno boquiabiertos en la puerta de casa.

Cameron se volvió a ellos.

-¿Va...en serio a...matarlo?- preguntó atemorizado.

-Espero que no- respondió su tía, visiblemente preocupada. En cuestión de segundos miró a su sobrino y al hombre para preguntar -¿Habéis... desayunado? Aún quedan tortitas y...café-

Ellos dos se miraron entre sí sin saber qué decir y bastante shockeados por el incidente de antes con Richard.