𝟞| 𝕀𝕟𝕔𝕠𝕞𝕠𝕕𝕠, 𝕚𝕟𝕔𝕠𝕞𝕠𝕕𝕠

1.8K 133 0
                                    


UNA RORY LLENA DE LAGRIMAS en su rostro llego a su casa y paso directamente a su cuarto sin percatarse que desde la cocina su madre la vio entrar

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

UNA RORY LLENA DE LAGRIMAS en su rostro llego a su casa y paso directamente a su cuarto sin percatarse que desde la cocina su madre la vio entrar.

—Hija, ¿te paso algo?— pregunto dando pequeños golpes en la puerta.

—No quiero hablar— se escucho una voz débil proveniente de la castaña.

—Solo dime que tienes, ¿es por lo que descubriste? ¿o alguien te hizo algo?— Mónica mantenía un tono de voz preocupado, —Lo que sea seguro lo podemos arreglar.

La adolescente que hasta hace un momento se encontraba acostada en la cama se paro a abrir, al ver a su madre no pudo evitar abrazarla y llorar aun más.

Entraron a la habitación cerrando la puerta a sus espaldas, —Todo va a estar bien— le susurraba a su hija mientras acariciaba su cabello.

—Soy tan estúpida— hablo entre sollozos.

—No lo eres— le afirmo la mujer separándose para poder limpiarle las lagrimas, —¿Quién te hizo sentirte así?

—Fui a la fiesta, todo estaba bien, ayude a Belly a buscar a Taylor y entonces la encontramos— explico tan rápido que apenas se entendía lo que decía, —Ella estaba con Steven, estaban besándose.

—Esta bien, llora todo lo que quieras— la trato de reconfortar volviendo a abrazarla al entender que se trataba todo, no era un secreto para las madres que desde siempre se habían gustado y mucho menos que últimamente estaban muy juntos.

—Mamá, tal vez hice algo mal, tal vez dije algo que no le gusto sin darme cuenta— trato de justificarlo.

Entre más lo pensaba sus ganas de llorar incrementaban.

—Estoy segura que tú no hiciste nada mal, trata de descansar y pensar con inteligencia— le aconsejo la mujer mayor.

Unos golpes en la puerta las hicieron sobresaltarse.

—Rory, ábreme— escucharon la voz de Conrad y se relajaron.

La castaña se separo de su madre para abrir la puerta, su mejor amigo estaba ahí con una expresión de preocupación y algunos golpes en el rostro.

Al verla ahí, con el maquillaje corrido por tanto llorar maldijo en sus adentros al no haber golpeado tanto como se merecía a Steven.

—Conrad, ¿qué te paso?— pregunto preocupada.

—Nada, ahora solo importas tú— aseguro tomándole la mano para atraerla a el y poder abrazarla.

La madre de la chica al sentir que su presencia sobraba paso por a lado de los jóvenes abrazados y fue a su cuarto cerrando la puerta al salir, confiaba en que el mayor de los hermanos Fisher ayudaría a su hija.

La castaña al sentir los brazos de su amigo rodearla continuo llorando, se sentía segura cuando estaba con el pero no de una manera romántica, los dos sabían que su conexión no iba más allá que una linda amistad. 

Just for a moment | The summer i turned pretty Donde viven las historias. Descúbrelo ahora