Capítulo 11

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Había pasado el fin de semana y ya estaba de vuelta a casa. Un fin de semana tranquilo con las típicas entrevistas y con una victoria de Max.

No había visto a Max durante el fin de semana, solo para las entrevistas pero ya está porque tenía muchísimo trabajo y con Lando apenas pude hablar por lo mismo.

Un fin de semana tranquilo, pero con muchas ganas de llegar a casa y poder estar con Jack y con mis padres.

LLAMADA TELEFÓNICA

- Hola cariño, ¿ya vas para casa? - preguntó mi padre al otro lado de la línea.

- Hola papá, sí, me estoy bajando del avión - dije.

- Cuando llegues, ¿Podrías ir al supermercado a comprar ? Tenemos que pasar a por Jack y vamos a llevarle a jugar un rato al parque - dijo mi padre.

- Sí, claro sin ningún problema - dije.

- Genial, pues nos vemos más tarde. Nosotros estamos todavía en el avión y tenemos que hacer unas cositas - dijo mi padre.

- Vale, luego hablamos - dije.

Me encantaba ver cómo mi padre había mejorado como padre, porque siempre con mi hermano mayor y conmigo le costaba bastante pero desde que él ganó mi custodia solo ha ido a mejor pero con Jack está siendo un padrazo y eso es lo que me encanta.

Me bajé del avión y cogí un taxi directa a casa para poder coger mi coche e ir al supermercado. Mi padre sabe que me encanta ir al súper porque me flipa poder mirar cada producto y escuchar música mientras hago la compra.

- Oh querida Laia, ¿Qué tal? - dijo nuestra vecina cuando me bajaba del ascensor.

- Hola Señora Durand, muy bien, ¿Y usted? - pregunté.

- Muy bien la verdad. Justo estaba apunto de ir a tocarles pero no sabía que se habían ido de viaje - dijo.

- Sí, acabo de llegar. ¿Ha pasado algo? - pregunté.

- No nada, solo que nos vamos unos días a ver a mi hermana a Italia y claro no nos podemos llevar a Simba. Era por si tú le puedes dar alguna vuelta por las tardes - dijo.

- Sí, claro sin ningún problema - dije.

- Genial, te dejo unas llaves de repuesto y el código de la alarma. Y te dejaré una lista con las horas de las comida - dijo.

- ¿En la mesita de la entrada? - pregunté.

- Sí, en esa. Me voy mañana y mi nieto viene pasado, así que solo sería mañana - dijo.

- Genial, no hay ningún problema - dije.

- Muchísimas gracias - y me dió un abrazo.

- De nada - dije.

Me despedí de ella y entré a casa. Dejé las maletas, cogí las llaves del coche y me fui al súper.

Tras bajarme en el super me puse los cascos, primero entré en algunas tiendas de ropa y luego entré al super.

ESCUCHAR ESTA MÚSICA MIENTRAS QUE LEES EL CAP COMO SI FUERAS LAIA

Iba mirando pasillo por pasillo tranquilamente, miraba cada producto y lo que podía hacer de comer, ya que cuando me dan ganas cocino y cuando Jack está aburrido nos ponemos a hacer postres.

- Perdón - dijo una chica tropezandose conmigo cuando estaba de espaldas.

- No te preocupes - dije cuando me di la vuelta y sonreí. Era una chica rubia que su cara se me era familiar pero no le di importancia.

- Vic, esto también necesitamos - dijo Max apareciendo y cuando me vio se quedó callado mientras me miraba.

- Vale, voy a buscar unas cosas - dijo la chica y se marchó.

-Hola Laia - dijo Max en el mismo sitio.

- Hola Max. ¿Qué tal? - pregunté.

- Muy bien, ¿Y tú? - dijo.

- Bien, haciendo la compra - dije.

- Ya somos dos - dijo y sonrió.

- No sabía que tuvieras pareja - dije.

- Noo, ella es mi hermana - dijo Max.

- No la vi muy bien - dije.

- Nos parecemos un poco - dijo Max y sacó su móvil y me enseñó una foto de él con su hermana.

Estaba cerca mía, y me encantaba el olor a su perfume, rocé su mano y estaba muy suave.

- Pues sí que se parecen un poco - dije y lo miré.

- Solo un poco - dijo Max y sonrió.

- Bueno, te dejo que si no te va a matar - dije.

- Tenemos una cena y nos toca cocinar a nosotros y está histérica - dijo Max.

- Podría ser yo tranquilamente - dije.

- Bueno adiós - dijo Max y comenzó a irse.

- Adiós - dije.

- Oye, ¿Te apetece que nos veamos un día de estos? - dijo Max parando en seco.

- Me parece buena idea - dije y mordí un poco mi labio inferior.

- Genial, pues nos vamos poniendo de acuerdo - dijo Max, sonrió y se dió la vuelta.

¿Una última pregunta? - Max VerstappenWhere stories live. Discover now