III

397 40 1
                                    

Il proprietario del giardino

__Te hice una pregunta y tú no lo sabes

__La niñera tuvo que haberle dado comida, pero no sé por qué está aquí.

__Se supone que esta pequeña bebé es tu única familia y no sabes si a comido__dice algo furiosa para voltease a hablar con Jenny__ A ver pequeña princesa tienes hambre.

A Jen parece simpatizar aquella chica y empieza a sonreír , esta hace lo mismo y le da un beso en la mejilla.

__Jeison puedes traerle comida.

__No es necesario yo le puedo preparar algo , además no quiero de verte nada mas con lo que te debe  mi padre es suficiente.

__Yo no pedí tu opinión__dice esta mientras manda al guardaespaldas a comprar algo.

__¿Por que haces esto?__pregunto mientras esta aun tiene a Jenny en sus brazos pero no contesta.

__Ya le di de comer, me voy.

Y así lo hizo salió de la casa luego de aver dormido a Jenny.

***

Llegue temprano a trabajar y como siempre estába Marck regañandome por haber dejado mi trabajo temprano, las horas pasaron y con ellas los clientes hasta que ella volvió.

__Me das un capuchino__dijo como si no me conociera.

Esto me extraña pero me pongo a prepararlo y trato de no darle importancia .

__Aquí esta su capuchino.

Esta no dice nada y solo toma el café pero antes deja un papel con una dirección.

Te veo en Rodeo Drive a las 6:00 pm y no faltes.

Bella.

Las horas comenzaron a transcurrir con normalidad, verdaderamente espero terminar con esto hoy. Pero al parecer el no llegara, se hicieron las 7:30 y por fin este llego, pero golpeado.

__¿Que te paso?__pregunte mientras echaba  su cabeza hacia atrás.

Este no contesta así que vuelvo a insistir hasta que este me lo dice.

__Fue mi padre fue hasta mi trabajo hacer un escandalo y llevarse a Jenny... Y así termine además de que me despidieron del trabajo.

Le pega y lo hace pasar como un deudor de más de 100 mil dólares, y ahora trata de llevarse a su hermana.


__¿ Y a Jenny le hizo algo?.

__No.

__Mañana vuelve a la cafetería.

__Pero.

__Solo haz caso, y súbete al auto.

The mafia roseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora