Ya lo sabe

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–Y entonces comenzaron a discutir e intenté detenerlos pero solo me regañaron y me pidieron que subiera a mi habitación.

Explicaba Rena colgada de cabeza en un árbol con el único agarre de sus piernas.

–Hmm, mis padres no solían pelear mucho– Vanessa estaba sentada bajo el mismo árbol con una botella de agua.

–Los míos tampoco y eso me preocupa, me sentí atacada cuando me castigaron por evitar que se siguieran peleando.

–¿Pero dejaron de hacerlo, no? ¿O sigue enojados?

–Lo segundo, y yo también me enojé– Dijo incorporando hasta quedar sentada en la rama que la sostenía –Y quiero darles una lección.

–¿Puedes dejar de pensar en venganza por un momento?– Al parecer el origen de esa palabra nació con ella.

–No, la venganza es lo mejor, y necesito que me ayudes– Bajo con entusiasmo dando brincos en su puesto. Vanessa se levantó para seguir trotando y Rena la siguió. –Como sabrás; a esta hora debería estar en clases. La escuela ya debió informar a mi casa que no estoy y a esta hora de seguro ellos están muy preocupados.

–¿Quiénes?

–¡Mis padres! Pongámonos en sintonía– Hizo un puchero al notar que la rubia no le estaba prestando mucha atención. Esta solo rodó los ojos –Pero si aparezco ahora probablemente solo me regañen así que necesito quedarme afuera un tiempo.

–Mh-hm.

–Como... Un para de días.

–Con un día estará bien.

–Sí, pero... No puedo quedarme sola.

–Y yo no te voy a recibir si es a dónde quieres llegar.

–¿Vas a dejarme sola en la calle?

–No, puedes fácilmente volver a tu casa.

–Pero mis papás...

–Rena, ¿Qué edad tienes?– La pelinegra arquero una ceja tras la pregunta.

–Creí que lo sabías...– Susurró haciendo un puchero –Tengo 11.

–Eres muy pequeña. Créeme que huir de esa forma no resolverá nada, tus padres no aprenderán una lección y no es venganza. Solo te acostumbrarás a resolver todo amenazando y manipulando a los demás. Serás igual que William– Rena abrió los ojos. No lo había pensado de esa forma.

–Yo no soy igual que William.

–Quizás no, pero eres igual a Cassidy– Ok, eso empezaba a ser personal.

–¿Entonces qué? ¿Me voy ahora y aparezco en casa para que me regañen?

–Prueba diciéndoles el la razón por la que lo hiciste en primer lugar– Vanessa se detuvo para darse vuelta y revolver el cabello de la niña que intentaba seguirle el paso –Estoy segura de que lo entenderán. Tus padres se oyen asombrosos, no como los míos.

Cambiaron de tema para que la pequeña no se sintiera tan abrumada y siguieron trotando. Vanessa le enseño un para de ejercicios que podría practicar en casa y Rena le habló más sobre el anime que estaba viendo. Era lindo que pudiesen entablar una conversación con temas que a ambas le gustarán sin aburrirse o sentirse incómodas. Supongo que la cura para un adulto aburrido era un niño hiperactivo.

En cuanto fueron las 10:30AM se dieron cuánta que habían pasado mucho tiempo juntas. William probablemente ya había despertado y seguro estaría de mal humor si no llegaba rápido.

En cuanto a Rena, no sabía que hacer, podía volver con su familia o esperar a que Ness se alejara lo suficiente como para seguirla. Definitivamente haría la segunda.

Family of psychopaths (Fnaf au)Où les histoires vivent. Découvrez maintenant