Cerrando ciclos

307 75 22
                                    

Han Jisung : 16 años, castaño/rubio.

Lee Minho: 17 años, azabache.

°°°

- No creo que esto funcione.

- Dudo que esto se haga así.

- ¡Cállense los dos! Dejen al experto trabajar. - exclamó Jeongin ya cansado de los murmullos de sus amigos.

- Pero si... ¡Ay! ¡Me acaba de entrar al ojo! ¡Me voy a quedar ciego! ¡No veo!

- No seas dramático Jisung-ah ni fue tanto, si quieres llamar la atención de Minho hyung debes de poner todas tus cartas sobre la mesa.

Dicho esto el menor de los Yang agarró una de las toallitas húmedas que tenía en su tocador y se dispuso a limpiar el tinte que había manchado parte de un dramático Jisung, quien continuaba moviendo sus manos buscando que el aire tratara de apaciguar el dolor que estaba sintiendo.

Todo había comenzado ya hace un par de horas cuando Jeongin decidió llamar a Jisung contándole que tenía algo muy importante que decirle, no se esperó que este viniera en compañía de Felix, pero eso no lo detuvo para arrastrarlo hacia su cuarto y vacearle toda una botella de tinte encima luego de un par de manotazos de por medio que se detuvieron hasta que mencionó a cierto azabache.

- No entiendo porqué cambiar el tono de su cabello ayudará en algo. - comentó Felix viendo con algo de pena al pobre Sung mientras Jeongin continuaba echando más tinte y poniendo más aluminio entre sus hebras.

- Es que yo ya estoy harto, ¿tú no lo estás? - preguntó jalando un poco el cabello de Jisung provocándole un lamento. - Vamos, no te jalé tan fuerte.

- Creo que es mejor que yo siga. - propuso el pecoso siendo ahora el quien tomaba un par de guantes para continuar el trabajo de oxigenar el cabello del antiguo castaño.

- No entiendo como si sabes que le gustas no haces nada. - dijo con desesperación el menor de todos mientras se tiraba a la cama. - Si yo supiera que quien me gusta corresponde mis sentimientos ya me le hubiera tirado encima.

- Pero Sunggie no es así, que tú seas un adolescente hormonal deja mucho que decir.

- ¡Cállate Lix! Que a ti nunca te haya gustado nadie no te da derecho a llamarme así. - argumentó el de ojitos pequeños viendo el sonrrojado rostro del pecoso.

- No griten que ya no sé si me tiembla el ojo por el tinte o por sus gritos. - replicó Jisung haciendo amago de levantarse. - Yo continuaré esto en el baño.

Recogiendo algunas de sus cosas y poniendo una bolsa sobre su cabeza desapareció de la vista de los demás.

- Oye Lix, no le vayas a decir a Minho hyung de lo que estoy haciendo con Jisung, tengo un plan y no quiero que se arruine. - pidió mientras se sentaba correctamente sobre la cama.

- No le diré nada. - respondió con una pequeña sonrisa. - Pero... a todo esto ¿qué es lo que tienes en mente? - soltó entrecerrando sus ojos tratando de escanear la mirada de su amigo.

- Ya lo verás. - respondió Yang mientras usaba ese tono de voz que a Felix le asustaba.

°°°

Lee Minho se creía lo suficientemente afortunado en estos momentos. Estaba iniciando su último año de preparatoria, no tenía ninguna tarea por hacer, sus mejores amigos se habían ido hace ya un rato después de un día entero jugando videojuegos y ahora se encontraba echado sobre su cama en compañía de sus gatitos sin ninguna  preocupación sobre sus hombros.

¡Quiero ser un gato!Wo Geschichten leben. Entdecke jetzt