Capítulo #1

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Me encontraba en mi recámara, decidiendo que vestido elegir para la fiesta de esta noche.
Mi papá es uno de los arquitectos mas importantes y adinerados de Nueva York, y como acaba de terminar la construcción de un enorme hotel -muy elegante, me atrevo a decir- harán un "open house" por lo que toda mi familia tiene que ir reluciente.
Encuentró en mi armario un vestido que no he usado, lo desprendo del gancho y lo reposó sobre mi cama, es negro y largo, con diamantes en el escote.
Me pusé el vestido, terminé de arreglarme y bajé las escaleras, donde mi familia aguardaba.
Mi papá vestía un smoking negro, mi madre un vestido rojo, largo y con detalles de piedras preciosas esparcidas sobre este, mientras mi hermano vestía similar a mi padre.

*******

El hotel, estaba precioso, todos estaban en uno de los salones para eventos especiales, había una barra al fondo del salon, mesas, pista de baile, candelabros con detalles en oro, hermoso.

-Mary, vamos con Downey -decía mi padre a mi madre.

Joseph y yo hibamos platicando de idioteces, el es 5 años mayor que yo pero aún así es muy amable conmigo, hubó un tiempo que siendo mi hermano, se separó de mi y la verdad me llevé una desepcción.
En fin, Downey es el apellído de uno de sus socios; su "sociedad" se consumó antes que la construcción fuera empezada, no lo conozco en persona pero tengo entendido que es un hombre muy carísmatico y alegre, pero hasta no ver no creer.

-¿Cómo estas Parker? -dijo un hombre con un cuerpo muy bien esculpido, ojos marrones, su corte de cabello era algo "juvenil" de los lados mas corto que en el centro, se le veía bien, unos labios muy bien delineados, barba de candado y piel blanca.

-Robert, ven te preseñtaré a mis hijos -decía mi padre mientras se encaminaba hacia Joseph y a mi, ahora tengo claro quien es el famoso Downey.

Robert saludó a mi hermano y después a mi, tomó mi mano y la beso como todo un caballero yo solo sonreí.

Mi padre platicaba con mi madre en una mesa, la cual estaba cerca de la pista de baile, yo caminé hacia la barra, ya por fin cumplí 19 años y creó que un trago nonme hará nada.
Había un hombre el cual vestía elegante, le pedí un vaso de whisky, en eso Robert llega a mi lado, se recarga a mi costado derecho y comienza a hablar.

-Una niña como tu no debería beber -dijo con aires de grandeza.

-Pues una niña como yo, puede beber ya que es mayor de edad, le informó -dije con vanidad mientras sostenía el vaso con mi mano derecha, el solo río.

-¿Te gustaría bailar? -dijo aquel hombre tan vanidoso.

Yo solo asentí, no quería amargarme la noche y que mal me haría bailar, además el hombre no esta nada feo, en eso comienza a sonar una canción lenta, me toma entre sus brazos y me apega a su cuerpo bien formado, toma mi mano derecha y la entrelaza con la suya mientras que el tiene su otra mano en mi cintura, poco a poco la música comienza a tomar color.
El baila muy bien.

-Para su edad no baila tan mal -dije en tono de burla.

-No soy tan viejo y hablame de tu -decía entre risas -y claro que bailo bien, no eres la primera que lo dice.

No creo que sea tan agradable como mis padres decían, es muy arrogante, pero no se porque de alguna manera me agrada.

Can't love youWhere stories live. Discover now