I

3.3K 242 245
                                    

 Hoy sería el día

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Hoy sería el día. Hoy le preguntará a su enamorado si le gustaría ser su novio.

Siempre tuvo un sentimiento característico con él, algo que desde hace mucho destaca de sus demás amistades. Primero pensó que era admiración, luego que era comodidad, después que era cariño amistoso muy fuerte por el hecho de que son mejores amigos. Pero con el paso del tiempo descubrió que realmente siempre fue *amor*, y uno muy fuerte, pues fue reforzado por su amistad de años, la comodidad que sentía, por la admiración y el apoyo mutuo que se daban.

Y hoy le expresaría eso.

Sabe cuándo y cómo lo va a hacer, al terminar las clases, se lo llevara a una parte donde nadie los moleste, pues no quería que se sienta presionado a aceptarlo por estar rodeados de gente, sabe lo incomodo que estarían en esa situación. Cuando tengan aquella privacidad, hablarían un poco para que no se sienta tan de repente aquella confesión, cuando estén en ambiente, le dirá lo que siente, y, si lo acepta, lo besará y abrazará.

Era un buen plan, ¿no?

⇢⇢⇢⇢⇢⇢⇢⇢⇢⇢⇢⇢≫

Las clases dieron su fin, esto hizo que el castaño tenga los nervios a flor de piel. Y junto a ello, una mala sensación se deposito en su cuerpo, podía sentirlo al fondo de la garganta, como si fuese un nudo, aunque también sentía el mismo nudo en el pecho. Decidió ignorarlo y pensar en cómo avanzar su plan.

"Tal vez le diga ahora que quiero hablar con él, o me lo lleve diciendo que quiero mostrarle un lugar que me pareció bonito como para almorzar junto a los chicos, o tal vez..."

-Hey! Te estaba buscando, amigo. -Su línea de pensamiento se vio cortada por la voz de el de ojos morados. -Quería hablar contigo, ¿podemos? -

-Uh? Oh, sí, claro, ¿qué pasa? -Pregunto el de piel canela.

-Me gustaría que tengamos privacidad, ¿sabes? -Menciono el azabache.

Bueno, el paso de pedirle estar a solas se hizo por su cuenta. Supuso que fue algo positivo, ya que no tendría por qué dar explicaciones.

-Está bien, ¿quieres que vayamos al parque cerca de aquí? No hay mucha gente normalmente, las únicas personas que puede haber son abuelos alimentando palomas. -Sugirió con una falsa tranquilidad el de mascarilla.

-Seguro, vamos. -Acepto lo propuesto por su amigo.

Luego de salir de la institución, el dúo de amigos se empezó a encaminar hacía dicho parque mientras hablaban de temas diversos, sacándose una que otra risa entre ellos. Para ambos era un ambiente cálido y cómodo.

Ya en su destino, se dispusieron a buscar una banca para que empezaran a hablar del tema por el cual buscaron privacidad.

-Yo... bueno esto me es vergonzoso. -Empezó a hablar Duxo mientras apoyaba una mano en su nuca como acto de nerviosismo.

-Parece como si te me fueras a confesar. -Aquino dijo con un tono burlesco para acto seguido reírse en su cara.

"Oh, como me encantaría que fuese eso..." El de ojos ámbar pensó con tristeza, cortando su risa.

-Si, si, muy chistosito, ja, ja, ja, mira cómo me rio, payasito. -Respondió con un tono que goteaba sarcasmo. -No, mira, esto es serio e importante, o al menos lo es para mí.

-Ay, ya webon, suéltalo, que me estas asustando, tarado.

Ambos se miraron directamente a los ojos, uno esperando a que su amigo empezara a hablar y el otro con nerviosismo pensando que su acompañante se iba a burlar.

-... ahora nos besamos? -Cuestiono el de cubrebocas con incomodidad por el silencio prologado.

-Cállate. -Respondió el pelinegro, un poco mas confiado por los chistes de su amigo. -Bueno, la cosa es que hay una chica que me parece bastante linda, pero me da vergüenza hablarle.

Con esa confesión, el ambiente se tornó silencioso e incómodo.

"¿Para esto quería hablar a solas? ¿No podíamos hablar en donde estábamos?" Aquino pensó con dolor. Pero, en paralelo a ello, pensó otra cosa "Si me gusta... ¿No debería sentirme feliz de que haya empezado a sentir interés en alguien que si le parece linda?".

Estos pensamientos empezaron a hacer conflicto en la mente del castaño, hasta empezó a sentir como su corazón se aceleraba y hacía que el nudo de su pecho y garganta doliera.

"Esto es muy cliché. Oh, hay dos mejores amigos que lo fueron por AÑOS, ¿qué pasa? Uno se enamoró del otro. Se quiere confesar, pero descubre que su enamorado le interesa alguien más. Esto nunca pasa, ¿A qué no?"

-Oye, te estoy hablando, ¿no me escuchas? -Duxo agito a su amigo para que lo escuchase. - Oye, tierra llamando a Aquisi. -Exclamo el de ojos morado.

-Uh? -Parece que la sacudida lo trajo de vuelta a la realidad.

-Que te paso webon? Te quedaste mirando a la nada de repente mientras te hablaba. -Se quejo el de barba. -Te decía que me ayudaras a hablarle a esa chica, ¿Puedes?

-... si, seguro... -Respondió decaído el contrario.

-Muchas gracias hermano! -Duxo le dio un abrazo lateral como agradecimiento. -Te prometo que cuando andemos juntos no me voy a olvidar de ti. -Comentó divertido.

A pesar de que se rio de lo dicho, se sentía mal, sentía como sus ojos empezaban a picar por las lágrimas que amenazaban en aparecer al frente de su enamorado.

-Bueno, me voy, que va a empezar a oscurecer, ¿no quieres venir conmigo? -Ofreció el de abrigo de paloma.

Como le encantaría decir que si, que si quería ir con él, que si quería estar con él, que lo quería a él. Pero no podía, porque sabía que iba a llorar si escuchaba su voz de nuevo ahora.

-Nah, no quiero ir a tu nido de rata, gracias. -Contesto burlón.

-Y luego preguntas el porque te trato mal. -Respondió con un falso tono ofendido, sabía que no se iban a tratar mal en serio, pero era su manera "no gay" (Según sus amigos) para decirse que se quieren. -Adiós, me voy a mi nido de ratas, ¡nos vemos mañana! -Y de aquella manera se fue a su casa, dejando solo al castaño.

"..." Sus pensamientos estaban silenciosos, como si tuviera miedo en perturbar el silencio de esa tarde-noche.

Estaban tan desconectado del mundo real que no sintió como las lagrimas se empezaron a acumular en sus ojos cristalinos. No sintió cuando dichas gotas saladas pasaban por su rostro. Se dio cuenta de ello apenas una gota cayo en el dorso de su mano. Y con ello, también se dio cuenta de lo oscuro que se había puesto.

"¿Cuánto tiempo llevo ahogándome en mi miseria?"

Cuando se levantó de donde se encontraba sentado para ya irse a su departamento, un sentimiento de desesperación apareció, pues sintió como sus pulmones se cerraron. Empezó a toser por falta de aire en su sistema, sentía como se sacudía su cuerpo por las fuertes toses.

Poso sus manos en su garganta, había algo atorado allí. Se saco la mascarilla que se estaba bajando por el movimiento de su mandíbula.

Paso unos segundos tosiendo, pero esos segundos parecían horas, y unas realmente largas y tortuosas. Se iba a dar por vencido, pero de repente, junto a unas gotas de tonos carmesí, salieron unos pétalos.

Se echó para atrás en la banca para poder estabilizarse. Parece que nadie escucho su alboroto, o, si lo hicieron, lo ignoraron.

Cuando recuperó el aire y se estabilizó, el ardor de su garganta se hizo presente, pero ignoró eso, ya que estaba petrificado, pues...

"Por qué carajos escupí pétalos y sangre?!"

⇢⇢⇢⇢⇢⇢⇢⇢⇢⇢⇢⇢

𝙰𝚖𝚘𝚛 || 𝙳𝚞𝚡𝚒𝚗𝚘Where stories live. Discover now