Linde de Eris

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Discordia 

La fortaleza negra en el linde de la diosa Eris había sido destruida por un Darkis los oscuris lograron cruzar al reino de Somnum, atravesándolos por medio de los sueños al reinó mortal o como bien se le conoce el reino de Tinitios, eran alrededor de las cuatro de la madrugada, Noah sudaba, temblaba y se movía por toda la cama, despertó un par de veces tratando de olvidar aquella pesadilla que lo torturaba esa noche, despertó fuertemente, mirando a su alrededor, se sentía observado, no había podido dormir bien.

«Déjame contarte mi historia» Escucho una voz en su mente «Hace mucho tiempo cuando los dioses controlaban este reino, la diosa Hipnos tomo una forma mortal para acompañar a sus hijos, muchos dioses quisieron seguirla, pues entendían que la era de las grandes deidades estaba por terminar, pero no todos los dioses estaban de acuerdo y Eris la diosa de la discordia, creo de su piel dos tipos de seres, los Oscuris, bestias de arena y oscuridad, el miedo, la tristeza y desesperación eran su alimento, su presencia es era como la muerte misma, robando el alma de los mortales cuando ya nos le quedaba nada más, luego creo a los darkis seres oscuros similares a los Arkys tanto en habilidades como en inhibidores, tienen características humanas, y pueden controlar la voluntad de los oscuris, trajeron al mundo muerte, guerras y enfermedades, como la Segunda Guerra Mundial, muchos de estos seres vivían vidas entre los glourants y Arkys con el propósito de crear discordia y caos en Tinitios, así fue como se surgieron grandes peleas por el poder en todos los reinos. Dioses de distintas regiones del mundo se unieron para luchar contra Eris y su ejercito oscuro, pero al verse superados en números Morfeo sacrificó su vida para crear a los Arkys, humanos con diferentes tipos de habilidades que pueden controlar la energía del universo por medio de un inhibidor físico como el que el tenia, a estas habilidades se les llamo sistema Arketype el cual se dividía en doce categorías diferentes comparándose a el nivel de poder que tenían los semi-dioses, tras años de batalla luego de la caída de el ultimo darkys tan poderoso como Eris el primero de mayo de mil novecientos cuarenta y cinco, la diosa Hipnos que viva en el reino mortal de tinitios, dejo su cuerpo creando con su energía celestial, un reino y enviando a los oscuris que quedaban al linde de Eris, una frontera entre somnum y el inframundo donde habitan los seres de oscuridad separando así a los humanos mejor conocidos como glourants del mundo mágico en el que vivimos «Noah Rytter tu eres»

«!A levantarse ¡Vamos! ¡Vas a llegar tarde! Y quiero comer pastel» dijo Amelia molesta mientras recogía la ropa de Noah en el suelo de la habitación, Noah sin muchas ganas de levantarse se envolvió entre las gruesas cobijas de su cama, Amelia enfurecida por el antojo removió las cortinas de la habitación dejando entrar toda la luz del sol y con fuerza arrebato las sábanas de la cama. En Onifor comenzaba a amanecer, se percibía el olor del pasto húmedo que había sido rociado por llovizna en la madrugada, las personas paseaban a sus mascotas, Noah caminó al baño y mojó su rostro con un poco de agua fría «¿Que era ese sueño» pensó Noah, Moroes y Amelia eran reconocidos en como grandes personajes, Moroes no solo era profesor de historia en tinitios, también era conocido como el gran héroe inmortal por luchar contra seiscientos sesenta y seis oscuris en batalla junto a su pelotón y no perder a ningún hombre luego se convirtió en  profesor de habilidades de guerra en Dromoguder. Amelia es una gran Arkys del tipo mago, bruja blanca enfocada en la alquimia y pócimas  quien también tiene tienda de sortilegios y pócimas en el centro de la ciudad.
—¡Me voy a la tienda! Cuídense mucho. —grito Amelia detrás de la puerta— Noah, no llegues tarde a casa hoy, invité a Jacob a cenar con nosotros.
—¡Vale! Estaré temprano, regresare con Jacob al salir de clases. —dijo Noah desde el baño de su habitación con el uniforme de la academia muy desarreglado, el cabello despeinado y un libro en la mano
—¿Nos vamos papa? —dijo Noah Apresurado— Vamos a llegar tarde.
—¡Espera! ¿Como piensas ir vestido de esa manera?—dijo Moroes— debería darte un poco de vergüenza.
—¡Ya basta papa! Voy a llegar tarde, no tengo tiempo de arreglarme —dijo Noah preocupado—  otra falta mas y no terminare el año.

Herederos de dioses Where stories live. Discover now