Amor Audaz- Elizabeth Olsen

56. Quiero sentirte

Pov, TN

Lizzie se cuela debajo de las sábanas, el colchón se mueve bajo su peso mientras se sienta a mi lado. Todavía con los ojos cerrados, actúo como si estuviera dormida, esperando lo que haría.

Siento su movimiento y lo siguiente que mi corazón late más rápido mientras deja suaves besos sobre mi rostro, moviendo sus labios un milímetro para presionar otro beso en mi piel. La sonrisa que aparece en mi rostro no puede ser reprimida cuando deja un rápido beso en mi nariz.

"Despierta, hermosa" Sus yemas de los dedos rozan mi rostro, pequeñas chispas llueven sobre mi rostro." Si no te despierto ahora, dormirás hasta el mediodía"

Me siento invencible, como si nada pudiera traerme más dolor. Su mano roza mi mandíbula, mi corazón se aprieta mientras acuna mi rostro.

Ella tiene mi corazón.

Revoloteando mis ojos abiertos, mis ojos se encuentran con los de ella, brillantemente mirándome. El afecto en sus ojos es tan cálido que me abruma con emociones.

"¿Todavía estoy soñando?"

Lizzie tararea, sonriendo mientras tira de su labio inferior entre los dientes. "Mmh, no sé. ¿Sueles soñar conmigo, t/n?"

"Ocasionalmente." Sonrío, abrazándola más cerca de mi cuerpo. "Aparecen con más frecuencia que antes, mi mente parece no poder dejarte ir ni siquiera en mi imaginación"

Lizzie se ríe: "Espero que solo sean buenos sueños"

"Oh, lo son, confía en mí" Susurro lentamente, dándole una sonrisa astuta mientras mi dedo recorre su clavícula. Siguiendo el movimiento con mis ojos, veo los ligeros escalofríos que aparecen en su piel expuesta. "A veces me despierto con tu nombre en la lengua, necesitando tragarme las palabras que quieren escapar de mis labios"

"Parece que tienes que contenerte" Lizzie murmura con diversión titubeando en su voz, poniéndose de rodillas, colocando sus manos al lado de mi cabeza. "No tienes que hacer eso cuando estás conmigo, cariño"

Mi respiración se atasca en mi garganta, su voz se vuelve más ronca mientras su cabello me hace cosquillas en la piel. Lizzie mueve la cabeza hacia abajo, con la boca rozando mi oreja, jadeando provocativamente contra mí. Calientes olas de placer se disparan a través de mí, el más simple de los toques eleva mi presión de sangre. "En realidad, espero que tengas el placer de mostrarme lo que estás soñando tan desesperadamente, niña bonita"

"Eso tomaría más tiempo de lo que podrías pensar" Me río, cerrando los ojos mientras destellos de sus manos atadas detrás de su espalda, labios separados con profundos suspiros aparecen detrás de mis párpados. "Mereces que te cuiden durante horas y horas, hasta que no te canses del deseo que nubla tu mente"

"Tenemos todo el tiempo del mundo." Presiona un beso contra mi mandíbula, sus dedos juegan con el dobladillo de mi camisa. "Puedes hacer todo lo que quieras conmigo. Te lo dije, quiero que hagas lo que quieras conmigo"

Gimo, rodando sobre ella y presionándola con fuerza contra la cama. Como si eso fuera exactamente lo que esperaba, sonríe ampliamente, lamiendo sus labios. Mi pulgar recorre su mandíbula, levantando una ceja mientras sigue sonriéndome con su sonrisa arrogante. "Cuidado con lo que deseas, Elizabeth. Tal vez no te guste lo que te espera"

"Nunca lo sabrás si no lo intentas. Así que haz lo peor que puedas, cariño" Susurra Lizzie.

"Oh, lo haré." En un segundo, le quito la camiseta por la cabeza, me muerdo la lengua y suprimo un gemido cuando mis ojos se fijan en su piel desnuda y me doy cuenta de que no lleva ropa interior.