| CAPÍTULO DOCE |

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IMPÍO

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IMPÍO

"Aquellos que restringen un deseo lo hacen porque es lo suficientemente débil para ser restringido."

William Blake

Dos meses atrás, tercera parte.

La búsqueda por Mark no le llevó tanto tiempo como el esperado, el cumulo de personas que observan apenadas y curiosas el auto estrellado contra uno de los faroles de luz aguardaban la llegada de la ambulancia y policía de Londres para que puedan ayudar al hombre mayor que a simple vista no parecía estar del todo bien.

Harry salió del auto y a paso lento camino entre las personas, las luces del accidentado auto tintineaban y se escuchaba aquel sonido estático saliendo del radio, algunos de los que se encontraban cerca del auto murmuraban al ver al chico llegar al auto. Styles asomó la cabeza por la ventanilla rota del piloto y retiro el cinturón de seguridad, Mark sangraba de un lado de la cabeza y la nariz, sus manos aferradas al volante descendieron al ver el rostro del chico.

—Mi fam... — las palabras no salieron como si estas fueran detenidas en su pecho.

—Lo siento — aquella frase que nunca fue dirigida hacia alguien que no sea de su familia, se escuchó salir de Harry.

Las manos de Harry se apoyaron en el marco de la ventilla, el sonido lastimero salió, los vidrios rotos incrustándose en sus palmas, el chico solo oía a las personas murmurar y la suave respiración de Mark haciéndose cada vez más lenta. Sintió aquella humedad en su rostro, asustado llevó sus manos hacia su rostro y notó en la punta de los dedos sus lágrimas. Las voces se hicieron más fuertes, regreso hacia las personas que lo señalaban con los dedos y sus miradas eran de confusión, pena y miedo. La frustración y la culpa llegaban hacia Harry, el muchacho se llevó ambas manos a la cabeza, una niña pequeña noto el arma que el rizado llevaba en el cinturón cuando este elevo las manos provocando que su gabardina dejara a la vista el revólver, la pequeña dio aviso a su madre que no reaccionó de lo más tranquila, originando el asombro de los que la rodeaban. Harry regresó su mirada hacia su cinturón y cerró deprisa su gabardina, aun con las miradas que solo se convirtieron en miedo, inició su camino hacia su auto y abandonó el lugar como hizo con Mark, con una idea, una promesa que le hizo aquella noche.

 Harry regresó su mirada hacia su cinturón y cerró deprisa su gabardina, aun con las miradas que solo se convirtieron en miedo, inició su camino hacia su auto y abandonó el lugar como hizo con Mark, con una idea, una promesa que le hizo aquella noche

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