AGENTE «Bonten X Reader»

§Venganza§

TOKIO JAPÓN

(KANG)

No recuerdo nada desde el avión. Pero mi cerebro asocio el rostro del piloto con una fotografía y un nombre.

Rindou Haitani.

Estaba atado de manos en una silla encerrado en una habitación obscura. No oía nada hasta que alguien abrió la puerta.

"Atalo y ponlo como al otro" Escuché una voz desconocida y algunos quejidos.

M e mantuve quiero fingiendo inconsciencia hasta que la puerta se cerró.

"Tu... No puedo imaginar para que Bonten nos quiere a ambos" Murmuré mirando al hombre a mi lado, este yacía inconsciente sobre una silla dejándome prácticamente solo y con las manos atadas.

(N)

Las fotografías y documentos firmados no hacían mas que revolver mis pensamientos. Si aceptaba lo que Mikey decía era prácticamente tirar a la mierda toda mi infancia y recuerdos. Todo lo que había vivido era una mentira. Una bien elaborada.

¿Y para que?

¿Para que hacerme pasar por eso?

"Fue para usarte. Quería a alguien con voluntad y sed de venganza para manipular" La voz de Manjiro te trajo de vuelta.

"Me estas pidiendo que mande a la mierda mi vida entra"

"No. Te pido que estés conmigo. Estabas con Kang por venganza, bueno, yo te ofrezco una mejor"

"Cuando me descubrieron dijiste que me dejarías destruirte, pero que ustedes también lo harían, ¿por eso hacen todo esto?" Pregunte al borde de un colapso mental. La persona que había idealizado y amado como figura paterna había sido el responsable de todo. ¿Y para que?

"Si aun lo deseas destrúyeme" su mano acaricio mi cuello subiendo hasta mi mandíbula, el tacto era frio pero reconfortante de cierta manera.

"¿Por que me muestras esto ahora? Para matarlos y estarte agradecida. Podría matarte a ti también y largarme" Nuestros rostros ya estaban peligrosamente cerca, pero aun así seguía pensando en todo este torbellino.

"Ambos sabemos que eso no pasará" Concluyó con toda seguridad pasando su pulgar por mi labio interior, bajó su mirada a estos y se acerco hasta que pude sentir su respiración chocar contra mi boca.

"¿Como lo sabes?" Arrastre las palabras con unas notas de inseguridad.

"Es demasiado tarde para ti" Respondió para juntar nuestros labios en un beso cargado de deseo del cual tomó el control en cuanto comenzó.

Algo en mi lo quería tanto como el a mi.

Así que simplemente correspondí.

Sus manos se notaban ansiosas por tocarme, paseándose rápidamente por cada esquina disponible de mi cuerpo hasta que decidió parar de reprende volviendo su mirada a mis pupilas.

"Te lo dije. Es demasiado tarde. Ya eres mía"

(OMNISCIENTE)

Hombres catalogados como de los mas peligrosos de todo el continente asiático descansaban tranquilos tomando una copa de vino en su gran salón disfrutando de música clásica y su misma compañía.

"¿Alguien mas pensaba que todo esto terminaría así?" Preguntó la voz de Naoto tomando un sorbo de su copa.

"Creo que hablo por todos al decir que no. Ella nos manejo bien, excelente diría yo. Pero citándola en aquella noche de póker 'Nada vale la pena si no trabajas por ello" Respondió Takeomi encendiendo lo que sería el segundo o tercer cigarrillo de la noche.