Hades

Capítulo 18

Estaba rígida e incómoda cuando los hombres se fueron y la reina me guió a un pequeño patio ubicado en el porche.

"Puedo manejarme sola, Noah", rechazó Keiko cuando la mano derecha de Ajax apareció. No se movió de su puesto.

Casi le grité, queriendo saber por qué no intervino cuando ellos casi se estaban desgarrando la garganta.

Entonces, cuando Keiko alisó su camisa a cuadros como si fuera una blusa fina, recordé que estaba en presencia de una mujer que podía controlar casi todos los aspectos de mi vida.

"Eso debe haber sido muy difícil de presenciar para ti. Lamento mucho las acciones de Ajax. Desde que conoció a Hades, ha estado fascinado por él. Nunca habíamos oído hablar de alguien como él.

"Se resiste a las órdenes reales, ¿verdad?"

"Lo sé. Una vez que lo descubrimos, se convirtió en un juego para Ajax. ¿Podía Hades resistir la plata? ¿Poseía algún tipo de fuerza sobrehumana? Y lo más importante para Ajax, ¿es físicamente más fuerte que el rey?"

"¿Así que esto fue solo un estúpido concurso de orinar?" exigí saber, sintiendo mis dientes apretarse. Había pasado por todo eso solo porque el rey Ajax quería probarse algo a sí mismo.

"Siempre he estado entre esos dos. Personalmente, creo que Hades podría matar a Ajax sin mucho esfuerzo. Es por eso que Hades siempre se resiste a cambiar, porque sabe lo poderoso que es. Entonces llegaste tú y eres un pequeño punto de debilidad para él. Una de las mejores cualidades de Ajax como rey es ser capaz de encontrar dónde duele y empujar hasta que alguien se rompa. Si no hubieras estado allí, Hades se habría derrumbado". Ella parpadeó con sus ojos almendrados, pareciendo contenerse. "Lo siento, estoy divagando. Con lo de tener un niño pequeño no he hablado con otro adulto en mucho tiempo. ¿Quieres algo de beber?"

"Agua por favor."

Keiko hizo un gesto con la mano, despidiendo a Noah, aunque esta era la segunda vez que lo despedía.

"Esto debe ser mucho para ti", reflexionó Keiko, ladeando la cabeza.

"Estoy haciendo lo que puedo", respondí con fuerza. "¿Es por eso que dejas que Hades haga lo que quiera? ¿Porque no puedes controlarlo con un tono real? ¿Es porque es tu hermanastro?" El hecho de que Keiko tuviera hermanos era una novedad para mí, pero me negaba a dejar que se notara.

Una ceja oscura se deslizó hacia arriba con confusión, pero por lo demás la reina permaneció bastante impasible. "Hades no es alguien a quien queramos controlar, necesariamente".

Y, reina o no, lo perdí. "¡Eso es absurdo! ¿No ves lo que le está haciendo a tu gente?" exigí. ¿Qué clase de reina dejaría que su gente fuera masacrada de esta manera? ¿No sabía ella cuánto sufría la gente? No podía ser la única persona que había perdido a un ser querido y las manadas habían perdido alfas, líderes, su forma de vida.

"Charlotte, estoy a cargo del bienestar de toda mi comunidad. Por supuesto que sé lo que Hades ha estado haciendo", dijo. Había un tono acerado en su voz, que me recordaba que, aunque su compañero había cruzado la línea, aún debían ser respetados.

Pero no me importaba.

"Él asesinó a Caleb. Mi manada se quedó con un viejo alfa y nadie está en condiciones de hacerse cargo. Mi padre tendrá que dirigir la manada mientras el alfa llora y yo tendré que aprender a estar sin mi mejor amigo por el resto de mi vida". Mi voz tembló al final y tuve que parpadear para contener las lágrimas mientras Noah dejaba dos vasos. Agua para mí y té helado para ella.

"¿Cuánto tiempo has estado con Hades?" ella preguntó.

"Solo un par de días".

Ella asintió para sí misma como si eso la ayudara a entender mi situación. "Como miembros de la realeza, no podemos controlar a Hades. La diosa de la luna no ha permitido que nadie tenga más poder que él y por una buena razón. La única opción disponible que tenemos para lidiar con él sería matarlo".

Tomé un saludable trago de agua, con la esperanza de que no volviera a subir cuando volviera a hablar. "¿Por qué no lo mataste entonces?" Mi corazón se encogió ante las palabras.

Keiko casi parecía impresionada de que tales palabras pudieran salir de mi boca sobre mi compañero sin tener una reacción física severa. Claramente, ella no entendía cuánto odiaba a este hombre.

"Hades ha sido un activo increíble para nosotros. Lamento que tenga una imagen pública tan mala, pero lo encuentro a el casi tan importante como Ajax y yo lo somos. Deshacernos de él de cualquier manera sería ridículo".

"No puedes hablar en serio", balbuceé, sin creer lo que escuchaba.

"No soy de las que guardan secretos. Sé lo condenatorio que puede ser para cualquier relación. Sin embargo, con Hades, no puedo interferir. Estas son conversaciones que tú y tu pareja necesitan tener. Mucho de la información que podría darte sería demasiado emocional para cualquiera de ustedes. El y Ajax ha hecho suficiente daño por una tarde".

"¡Es un asesino!"

"Él es tu compañero", replicó ella. "Estoy segura de que si le preguntas algo, estará más que encantado de decirte la verdad. Solo necesitas estar dispuesta a escuchar".

"Pero-"

"No estoy interrumpiendo nada, ¿verdad?" Hades murmuró detrás de mí, su voz baja y grave.

"Para nada", murmuró Keiko con una brillante sonrisa.

Luego me quedé escuchando mientras ella y Hades hablaban de cosas triviales como parientes y eventos actuales. No pude evitar mirarla mientras bebía mi agua. Tenía poder para controlar la situación, para evitar que asesinaran a mi mejor amigo, pero no había hecho nada. Y ahora ella estaba bromeando con él como si fuera un santo.

Cuando nos fuimos me quedé en silencio, con la cabeza apoyada en la ventana.

Si la reina misma no haría nada para controlar a la bestia, ¿qué podría hacer yo?

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Les quiero ♫

- Nicol