[05]

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JiMin alzó el vaso que tenía en su mano mientras veía a YoonGi a través de la distancia. YoonGi sonreía de una forma que removió algo en su interior.

Quizás no solo era la sonrisa, tal vez era la forma en la que lo miraba, como si fuera un jodido depredador al acecho.

Pero JiMin estaba decidido en no caer tan fácil ante el pálido. Él quería tirar de ese hilo que los sujetaba a ambos hasta que la desesperación fuera mutua.

YoonGi había mostrado sus cartas y con un movimiento había puesto la partida a su favor, JiMin esperaba su revancha y estaba seguro que la tendría y sería el completo ganador.

—Deberías de darme el secreto o por lo menos, si no estás interesado, presentármelo. —JiMin escuchó el comentario del chico de la barra con poco interés.

—No creo compartir, por lo menos no ahora. —Explicó tranquilamente mientras veía hacia donde YoonGi se encontraba.

Había llegado un hombre junto a él.

JiMin torció los labios en una sonrisa victoriosa cuando YoonGi le observó mientras le decía algo al chico que lo rondaba.

—¿Se conocen? —JiMin asintió mientras se levantaba de su asiento y dejaba algunos billetes sobre la barra.

—Es mi profesor en la universidad. —Mencionó guiñándole el ojo al chico detrás de la barra mientras veía la mueca confundida del contrario.

JiMin poco le importó.

Fuera de la universidad eran dos hombres completamente libres de hacer los que se le antojara.

Y JiMin quería joder con Min YoonGi.

La apuesta era un motivo, pero desde aquel efímero encuentro, eso había pasado a un segundo plano.

Había una extraña atracción que se quedó con él y por la forma en la que YoonGi le veía, el mayor también podía sentirla.

—Perfectamente puedo pagar por mis tragos. —Mencionó tomando asiento a su lado. No pasó desapercibido la mirada de Min sobre su cuerpo en ningún momento.

Victorioso cruzó las piernas y se acomodó de forma que pudiera ver mejor al pálido. YoonGi sonrió de lado mientras se encogía de hombros.

—Me pareció la forma adecuada de llamar tu atención antes de que alguien más apareciera.

JiMin asintió.

—Tienes razón. Tenía algo en mente pero verte por aquí cambió mis planes por completo. —Mencionó divertido ante la expresión curiosa que se dibujó en el rostro del mayor.

—¿Que planes tenías? —Cuestionó. JiMin sonrió un momento antes de desviar la mirada de algún punto en específico entre la multitud.

Sin pensarlo por segunda vez, se levantó de su asiento ante la mirada curiosa y expectante del pálido.

Sentándose ahorcajadas sobre este, sonrió cuando las manos de YoonGi apresaron su cintura y la mirada de este conectó directamente con sus ojos.

—Solo tenía ganas de tomar un poco y perderme un rato con alguien, pero mírate... Como caído del cielo apareciste. —Susurró relamiéndose los labios. YoonGi estuvo atento a ese movimiento, relamiéndose los suyos mientras sentía un leve vaivén sobre él por parte de JiMin. —¿El atrevido profesor Min que conocí días atrás no está aquí? —Cuestionó JiMin con ánimos de provocar mientras deslizaba sus manos entre las clavículas del mayor para luego, enredarse alrededor del cuello de este.

YoonGi arqueó la ceja.

—¿No hay nadie esperando por ti hoy? —Preguntó. JiMin negó.

—Caso cerrado. ¿Tú? —Cuestionó con interés. —¿Tu linda muñequita está esperando en casa o está por aquí?

Mine » YoonMin.Where stories live. Discover now