Emociones.

2.1K 179 95
                                    

Quackity se fue corriendo al baño a encargarse de su problemita, con la excusa de solo ir a arreglarse algo. Pues recordemos que Luzu puso nuevamente una droga en su copa.

Se sentó en la taza del baño y comenzó a tocarse, sus gemidos y jadeos eran silenciados por su mano desocupada. Le estaba costando ser silencioso.

L: ¿Patito?, necesito hablar contigo. No quiero pelear, solo quiero solucionar las cosas.

El menor se calló de golpe y comenzó a nivelar muy lentamente su respiración para finalmente hablar con debilidad.

Q: E-está bien Lusu, en un momento salgo.

L: Bien, te veo en la cocina, te prepararé algo delicioso.

Contestó este último para proceder a alejarse lentamente del baño y entrar a su cocina, su amada cocina. Le encantaba cocinar y es por eso que él eligió todos los adornos, cuchillos y sartenes, era un hobbie muy desestresante y tranquilo.

Por el lado de Quackity terminó de tocarse y se lavó las manos, ya con estas húmedas se acomodó un poco el pelo y se puso nuevamente su gorro negro, disponiéndose a salir del baño.

Cuando salió daba pasos pequeños y lentos, tenía un poco de ansiedad pensar de qué era lo que Luzu quería hablar con seriedad, por lo general sólo suelta lo que piensa y siente, mientras que lo que opinen y sientan los otros no entra en discusión.

“Un ser de arrogancia y mierda, eso es lo que es.”-pensaba para si mismo, hasta que sus pensamientos fueron callados al inhalar el olor dulce que se desprendía de su cocina.

Se acercó con un destello en los ojos y posó su mirada en el castaño, quien estaba terminando de mezclar su pequeña receta de microondas.

Q: ¿Sabes que eres muy atractivo cuando te concentras? -soltó sin más.-

L: ¿Eso piensas? -preguntó con una voz ronca y soltó una risa algo tonta, le encantaba que su patito le dijera cosas así, se sentía el más afortunado.-

Q: No sólo lo pienso, me atrevo a confirmarlo. Tus hombros anchos y esa camisa pegada a tu torso…, eres irresistible baby.

Ambos rieron un poco, se respiraba paz en el ambiente, la comida los mantenía juntos. Y en medio de todo, Quackity se percató de los ojos del castaño, quien ahora no tenía su típico mechón de pelo en su ojo izquierdo, dejando ver que ahora tenía un ojo rojizo como el fuego y el otro era de un color café pacífico.

Todo era color de rosas, hasta que Luzu sonrió de una forma tal que hizo recordar a Quackity a su ex novio…, Jschlat. “¿Qué carajo?”, pensó exaltado.

El castaño de percató del cambio de humor repentino de Quackity, y después de poner las tazas en el microondas se acercó tranquilamente a su amado, se notaban sus nervios nuevamente por cómo jugaba con sus dedos y miraba hacia abajo con desdén.

L: ¿Pasa algo Quacks?

Preguntó tranquilo mientras pasaba su mano al rededor de un mechón del cabello del menor.

Quackity le miró triste, sus ojos se cristalizaron. Que lindo era sentirse querido nuevamente.

Q: …, hay cosas que no te eh contado Lusu, cosas de mi pasado que no quisiera recordar más, pero siguen ahí, todavía me siento encadenado a estos recuerdos y pensamientos intrusivos…

Luzu ladeó su cabeza con curiosidad, pues jamás había oído a Quackity hablar de su pasado, y ahora que lo hacía parecía ser muy lúgubre y destructivo.

L: Descuida Quacks..., puedes contarme cuanto quieras, siempre te escucharé y estaré-, perdón, estaremos siempre para ti...

«¿“Estaremos”...?», aquella frase resonó en la cabeza del menor, quien no aguantó más la curiosidad y preguntó.

You're so toxic~, and I love it..., why?/LuckityWhere stories live. Discover now