Glacies (Una historia de Miraculous)

Capitulo 4

Madrid, España: Hace un año y 3 meses.

Nos encontramos con Chloe con una bolsa de la compra mientras observaba una lista de la compra.

—Bueno... Menos mal que es la compra para el fin de semana y el Corte Ingles queda relativamente cerca. — comento la rubia.

En eso de pronto escucho el ruido de algo y vio de pronto algo llegar a ese lugar. Era una especie de máquina de combate extraña y muy robusta en forma de humano, cerca allí había alguien extraño.

Era un hombre cubierto de hielo, como si fuese una coraza, no tenía expresión en su rostro porque parecía que en su rostro hubiese como una máscara cubriéndole la boca que poseía orificios de la que salía vaho y sus ojos eran de forma picuda de aspecto amenazante.

—Zanger, debes de ser detenido por tus atentados ante el orden público y robo de material letal. — fueron las palabras de ese chico de hielo con seriedad.

En eso el chico de hielo saco de su piel helada una extraña estaca de hielo que se convirtió en una guadaña, para en eso ver como este atacaba al robot con aquella arma.

Chloe se quedó incrédula ante esto y vio a la gente grabar la situación con fascinación. Chloe no lo entendía por lo que decidió preguntarle a una muchacha que había quien era ese héroe.

—Disculpe, ¿Y ese héroe cuál es?

—Él es Glacies, el héroe del hielo. Cuentan que el origen de sus poderes puede ser por un fantasma milenario de las nieves vengativo que llego a aquí y que permite usar sus grandiosos poderes para proteger a la gente.

Chloe se quedó un poco sorprendida por esto, y bastante escéptica ante este origen de los poderes del chico, pregunto.

— ¿Pero es cierto eso del fantasma?

— En realidad nadie lo sabe, crean teorías sobre el origen de algunos héroes de los que no se saben su origen como pasatiempo.

En eso las dos observaron con pánico que lo que parecía ser una daga de hielo, iba a ir a por ellas, aquella chica se consiguió apartar, pero a Chloe no le dio tiempo a reaccionar, por lo que esta cerro los ojos esperando su muerte, cosa que nunca paso.

Cuando espero unos segundos al darse cuenta que aún estaba de pie, abrió lentamente sus ojos y pudo ver ahí delante de ella a Glacies, que delante de ella había creado un muro de hielo.

Chloe se quedó incrédula ante esto, Glacies observo detrás de el para ver a la muchacha y en eso vio que de la máscara salía vaho, y con ello, unas palabras.

— ¿Estas bien?

Chloe solo asintió con la cabeza aun sin salir de su estado de shock por lo que había ocurrido, mientras que vio a Glacies apartarse del muro de hielo y ver al villano. En eso la rubia pudo ver como Glacies sacaba de sus brazos unas cuchillas y este ir a atacar al villano.

Chloe se quedó observando detrás de aquel muro de hielo lo que estaba ocurriendo hasta que esta pudo ver a Glacies ganándole a ese villano con cierta dificultad, desenmascarándolo delante de todos e inutilizándolo.

En eso pudo ver a la policía llegar y observar, para un poco su sorpresa por no estar acostumbrada, que aquel villano fuese arrestado.

Esta iba a irse, pero en eso sintió una mano helada en su hombro, se giró a ver y vio que era el héroe de hielo. Su expresión de los ojos que parecía tosca se suavizo ante ella mientras se veía un poco de vaho salir por su boca.

— ¿Te encuentras bien?

Chloe solo asintió con la cabeza, Glacies tomo suavemente la mano de la chica un momento un poco curioso, cosa que provoco en Chloe que esta se pusiese colorada. El héroe de hielo la soltó y le hablo con calma.

—Menos mal que no te ha ocurrido nada. Puedes irte, señorita.

Chloe solo dio una ligera sonrisa al héroe y solo daría una ligera sonrisa, para con ello irse.

Paris, Francia: Actualidad.

Nos encontramos con Chloe y con Esteban en el hostal donde se iban a quedar los dos a dormir.

—Pues va a ser bastante cómodo la verdad, para lo que va a ser realmente, dos semanas, se está bastante bien— comento Esteban observando la habitación.

Era bastante pequeña, con dos camas de sábanas blancas y bastante normalita. Chloe solo dio una ligera sonrisa un poco apenada y le hablo

—Sí, la verdad es que sí. Y menos mal que el que puso este hostal no conoce absolutamente nada de lo que ocurrió aquel día.

A Chloe se le vio bastante apenada, cosa que también hizo que Esteban se apenase y le tomase suavemente la mano a esta.

—Se darán cuenta de que has cambiado.

Chloe solo negó con la cabeza ante esto.

—Nunca me van a perdonar, y menos por lo que hice, ¡Yo fui quien revelo las identidades de Ladybug y Chat noir!

— ¿Pero paso algo con ello? Míralos, aún siguen siendo héroes, siguen siendo ellos y nada ha cambiado desde que tú te has ido, solo hay un nuevo portador de la mariposa tocando los cojones de Paris y hay un grupo de héroes grande para solventarlo más rápido— hablo Esteban con tono calmado a la rubia.

Esto dejo un poco perpleja a la chica. Esteban le basto con coger el móvil, meterse a noticias de Paris y enseñárselo a Chloe. Tanto Ladybug como Chat noir seguían siendo los héroes de la ciudad y esto solo provoco el enfado de Chloe.

— ¡A mí me quitaron el miraculous de la abeja por haber revelado mi identidad heroica al mundo! ¡A mí me quitaron las posibilidades de intentar ser mínimamente buena, de que con ello poder rectificar! ¿¡Y a ellos no!?

De la rabia, Chloe se rompió a llorar y se fue a los brazos de Esteban para que este la consolase, cosa que lo único que pudo hacer el español es reconfortarla.

—La forma dictatorial que tuviste fue normal, eras niña de 15 años con un poder inmenso y lo único que queremos siendo adolescentes es que nos hagan caso y pensar en nosotros mismos. A un adolescente de normal no se le hubiera puesto en un cargo así y que ahora te odien por haberte comportado como una adolescente que no sabía comportarse hace dos años es ilógico para alguien extranjero como yo. Además de que en dos años alguien puede cambiar perfectamente de como era antes, solo que aquí nadie piensa eso.

Chloe dejo de llorar gracias a las palabras, no solo lógicas, si no también cálidas, del muchacho.

—Menos mal que conozco a alguien que tiene dos dedos delante que ve estas cosas.

Esteban solo dio una ligera risa ante esto y acaricio el cabello de la muchacha con sus dedos suavemente.

— ¿Qué te apetece hacer ahora?

—Lo que sea, pero no me apetece para nada salir de la habitación, tengo más que vista la ciudad y tú solo has venido como "escolta" mío.

— ¿Nos echamos una siesta? Yo estoy un poco reventado por el viaje y no he podido dormir en el avión.

—Bueno, si ese es tu plan... Pues no tengo quejas.

Los dos se rieron ante esto y en eso Chloe se acercó y le dio un pico a Esteban en los labios.

Los dos después de este adorable beso, se vieron y se volvieron a reír. Esteban tomo suavemente las manos de la chica y en eso le dio una ligera sonrisa a esta.

—Ahora te encontraras bien conmigo, te lo prometo.

En eso vieron afuera algo que les llamo la atención. Era un villano de temática de rata.

—Espera, ¿Ese no era el tipo que tenía una obsesión rara con las palomas? ¿Qué hace ahora con obsesión por las ratas? Primero ratas voladoras y ahora ratas a secas.

En eso esta se giró a ver a Esteban, que empezó a ver que su piel se empezó a helar y a crearse esa coraza para trasformarse en Glacies, algo que llamaba de ese estado de transformación era que sus ojos se volvieron amarillos.

—Veamos que hacen las ratas ante el hielo.