Trágico Romance | Keenry

34 | ¿Podemos ir a verla?

Las paredes estaban adornadas con pequeños peces en ella. Y aunque los asientos fueran incómodos al parecer sería la cama de ellos esa noche,pero no tenían pensado dormir. Daniel fue por algo de comida al buffet del hospital.

Miguel deambulaba por todo el pasillo esperando que la puerta con el cartel de " Maternidad " por encima se abriese y la doctora tan solo dijera que su madre estaba bien. Rosa por otro lado tenía un collar con un dije de cruz entre sus manos y rezaba de manera silenciosa.

Sam junto a Amanda preguntaban a cada enfermero que pasaba o doctor que salía de la puerta color azul si sabían algo sobre Carmen,pero simplemente no había ningún tipo de información.

Tory mordía sus uñas sentada sobre aquel incómodo pedazo de plástico duro,su cuerpo posicionado hacia adelante junto a un ademan en sus manos no era buena señal. Quería llegar antes de que entrara a sala de parto pero el trafico no ayudó mucho.

— Tory debes calmarte. — Su novio interrumpió los pensamientos negativos de ella — Todo saldrá bien.

— Robby estoy bien. — Mintió acomodándose en el asiento tirando su cuerpo al respaldar.

— No seas así. — Separo las manos de ella alejandolas de su boca — Es malo eso y lo noto en tu cuerpo,estas nerviosa.

— Claro que si. — Chisto su lengua — No entiendo como tu no.

— Porque se que todo saldrá bien. — Aseguro — Si piensas en cosas malas lo atraes.

Paso una mano por su rostro totalmente frustrada,tenía ganas de llorar al sentir todas las emociones mezcladas. Podría entrar a la sala de parto con tan solo ver que Carmen y el bebé estaban de perfecta salud.

El estrés mezclado con la ansiedad provocaban un nudo en su garganta y también que sus ojos se enrojecimiento. Por más que su novio intentase calmarla no había caso.

— Linda de verdad. — Bajo la mano al vientre pequeño de ella — Les hace mal.

— Dios Robby que estoy bien. — Levantó ambas manos casi gritando con un tono alterado — Deja de ser pesado.

El rubio bufo masticando con sus dientes frontales el chicle de menta — Encima que lo hago por el bien tuyo y de mi hijo. Cálmate o nos iremos. — Opto por la última opción.

— Largate tu,yo hasta no ver a Carmen con su hijo en brazos no me voy de aquí. — Le aseguro cruzando sus brazos y frunciendo el ceño;su voz estaba a punto de quebrarse

— Es nuestro bebé el que tienes en el vientre y por mucho que estés preocupada ya déjalo ir. Carmen está bien. — Repitio por tercera vez bajando su tono de voz — No quiero que te pase nada a ti ni a mi hijo. — Puso una mano sobre la pierna de ella — Calmate.

Amanda al oír como la pareja de adolescente estaba a punto de comenzar una discusión decidió tomar cartas en el asunto. Se paro frente a ambos llamando la atención de estos.

— ¿Robby porque no vas con Miguel?. Esta a punto de desmayarse. — Coloco su mano en el hombro de el,solo asintió para levantarse.

Choco miradas con su novia pero esta la desvío,reemplazo el lugar del rubio entre suspiros.

— No digas que me calme. — Pidió volteandose a ella
— Porque solo me altera mas.

— Robby no quiere hacerte enojar,lo hace por tu bien.

— Pero me altera. — Explico con su ceño fruncido
— Aparte hoy en el dojo....

Interrumpió a la joven — Sam me contó todo,los celos siempre van a estar. Yo soy celosa de Daniel y estamos casados,pero no por eso tienen que discutir todo el tiempo.